El primer ministro kosovar, acusado de tráfico de órganos humanos y drogas
La Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa podría considerar al actual primer ministro de la autoproclamada república de Kosovo, Hashim Thaçi, cuyo partido ganó las recientes elecciones generales en la región, como un delincuente implicado en el tráfico ilegal de órganos humanos, así como en
La Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa podría considerar al actual primer ministro de la autoproclamada república de Kosovo, Hashim Thaçi, cuyo partido ganó las recientes elecciones generales en la región, como un delincuente implicado en el tráfico ilegal de órganos humanos, así como en varios asesinatos y chantaje.
Este jueves el organismo analizará las conclusiones de un grupo de expertos internacionales, encabezado por el senador suizo Dick Marty, que realizó su propia investigación tras las polémicas revelaciones de Carla Del Ponte, fiscal jefe del Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia, que hace dos años publicó su libro 'The Hunt: Me and the War Criminals', donde reveló detalles de los delitos cometidos por la mafia kosovar en esta autonomía serbia.
Según descubrió el grupo de Marty, el primer ministro Thaçi dirigió el narcotráfico y "controló las matanzas, detenciones extrajudiciales, interrogatorios y palizas en varias partes de la región", mientras que sus ayudantes llevaban a cabo contrabando de armas. Bajo el mando directo de Hashim Thaç, los combatientes del Ejército de Liberación de Kosovo (ELK), la mayoría de los cuales actualmente ocupan puestos gubernamentales, secuestraban y mataban a la gente -principalmente, a los serbios y ciudadanos de otros países, como Rusia, Moldavia, Kazajistán y Turquía- con el fin de comerciar con sus órganos. Según testimonios recogidos por los investigadores, los prisioneros eran ejecutados de un disparo en la cabeza e inmediatamente eran "operados para extraerles uno o varios órganos" que después se vendían a clínicas privadas extranjeras.
"Cuando los cirujanos de trasplantes confirmaban que estaban listos para operar, los prisioneros eran sacados de la ‘casa segura’ de uno en uno, ejecutados sumariamente por un pistolero del UCK y sus cuerpos transportados rápidamente a una clínica", dice Marty, subrayando que la figura central de estas operaciones, que se realizan hasta la actualidad a pesar de la presencia de los observadores internacionales en la autonomía, es uno de los consejeros del primer ministro.
"Los datos revelados contradicen la imagen del ELK como un movimiento guerrillero que defendió valientemente el derecho de independencia de los kosovares", lo que fue propagado ampliamente, en particular gracias al apoyo de Estados Unidos, indica Marty. En realidad, ya hace 11 años las autoridades estadounidenses, así como los representantes de los países de la OTAN, recibieron la información completa de la actividad criminal del político kosovar: este hombre figuró en sus informes secretos como el "jefe criminal más peligroso" de Kosovo. "Lo que preocupa más es que toda la comunidad internacional que estaba presente en Kosovo -desde los representantes de EE. UU. hasta otros de sus aliados - sin ninguna duda, tuvieron datos sobre la actividad criminal del grupo de Thaçi, pero nadie reaccionó", subraya.
Marty, quién, según sus palabras, se tropezó con la oposición de algunos representantes de la UE durante la investigación, advirtió también que todas estas actividades criminales ocurren en pleno corazón de Europa y la APCE ya no puede ignorarlas. "Hemos demostrado los vínculos entre el crimen organizado y la administración de Kosovo. (...) La calma y renuncia a reaccionar a este escándalo son inadmisibles".
El Gobierno de Kosovo ya ha respondido a este informe, rechazando las acusaciones y considerándolo como difamatorio. Al mismo tiempo, ha amenazado conadoptar "todos los pasos necesarios" para aclarar las calumnias de Dick Marty.
Mientras tanto, Rusia expresó su preocupación por estas revelaciones. Según el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, crímenes de este calibre no deben ocultarse. "Recientemente ya se dieron casos en los que los informes sobre la investigación de algunos acontecimientos en los Balcanes se trataron de silenciar y ocultar al público. Y para que no ocurra lo mismo con el informe del que hablan los medios de comunicación ahora, hay que lograr que se divulgue ampliamente. Son asuntos muy serios. Y si se confirman, supondrían un crimen contra la humanidad".
Detalles oscuros de la vida del líder kosovar
Según los habitantes del pueblo donde nació el futuro luchador por la independencia de Kosovo, no obtuvo enseñanza primaria y se conservó en la memoria colectiva como un "camorrista de las tascas locales" que presionó a los vendedores y compradores en los bazares, robando sus géneros. La autobiografía oficial de Tachi dice que se licenció en la Universidad de Pristina y después ingresó a la de Zúrich, donde estudió Relaciones Internacionales.
Desde el 1992 Thaçi se unió a los grupos armados ilegales que actuaron en el territorio de Kosovo. Fue uno de los organizadores del atentado en el pueblo de Glogovac en 1993, en el que murieron varios policías serbios.
Este mismo año fundó el ELK. Es interesante que sus propios aliados le llamen 'Gjarperi' ('Serpiente'), la palabra albanesa que tiene dos sentidos: la culebra o también un hombre con recursos, de poca confianza.
Tras pasar un curso de instrucción de combate en Albania, el grupo de Thaçi cometió varios actos terroristas en el territorio kosovar. En 1997 un juzgado de Pristina le condenó en rebeldía a 10 años de prisión y el año siguiente fue extendido el mandato internacional de su arresto, pero la policía no logró detenerle.
Según los investigadores, ya a principios de los 90 Thaçi controlaba cerca del 10-15 % de la actividad criminal en Kosovo, enriqueciéndose con el tráfico de las drogas, la prostitución, el contrabando de armas y cigarros, el robo de coches y productos petroleros y colaborando con los grupos ciminales de algunos países vecinos.
A principios de 1999 se convirtió en uno de los comandantes clandestinos más influyentes de Kosovo para "llevar a la autonomía a la independencia" y encabezar el gobierno local. Al comentar este camino al poder, el ex primer ministro expulsado de los albaneses de Kosovo, Bujar Bukoshi, aseguró que "los cadáveres nunca habían obstaculizado la carrera de Hashim Thaçi".