Desafortunadamente, la Navidad del 2010 resultó ser demasiado blanca para Europa y miles de pasajeros se ven obligados a celebrar en los aeropuertos. Es la tercera vez durante este diciembre en que el transporte aéreo resulta bloqueado por las intensas nevadas. Siim Kallas, vicepresidente de la Comisión Europea y comisario de Transportes, criticó a las autoridades de los aeropuertos europeos por su incapacidad de cumplir con los pasajeros bajo las condiciones de vientos blancos.
En Francia, Bélgica, Alemania e Irlanda están cancelados cientos de vuelos, mientras que en el norte de Italia se mantiene el estado de alerta a causa de las lluvias.
Francia
Los ferroviarios, en especial en el este y sureste del país, sufren la acumulación de nieve: el horario tanto de los trenes locales como del Eurostar se realiza con severos retrasos. En 21 departamentos de Francia continúa la alerta por nieve y está muy complicada la circulación en carreteras secundarias.
Este 24 de diciembre, unos 60.000 pasajeros resultaron atrapados en el aeropuerto de Charles de Gaulle de París, que se vio obligado a cancelar unos 400 vuelos por el déficit de líquido anticongelante para quitar el hielo a los aviones. El productor principal de esta sustancia en Francia, una planta en Fos-sur-Mer, está de huelga.
Las autoridades del aeropuerto informan que ya habían recibido una entrega urgente de 12 toneladas del líquido de los EE. UU. y que 22 toneladas más están en camino desde Alemania en camiones. Sin embargo, teniendo en cuenta que las nieves bloquearon las autopistas europeas también, no se puede predecir cuándo la carga de gran valor finalmente llegará a su destino. La cadena BFM TV informó que Charles de Gaulle sufre también por la falta de sales especiales que se usan para polvorear las pistas.
Del aeropuerto evacuaron, además, a unas 2.000 personas. El tejado de uno de las terminales acumuló una capa de nieve de unos 60 centímetros de grosor, y de ella de desprendió una avalancha de unos 30 centímetros. Los autoridades optaron por no arriesgarse y para todo el tiempo que duraron las labores de limpieza del techo, sacaron a los pasajeros del edificio.
El portavoz del aeropuerto comunicó que el sábado Charles de Gaulle empezará a funcionar a plena escala. El único consuelo para los pasajeros que tienen la mala suerte de pasar la Navidad en salas de espera es que tienen a su disposición camas plegables suministradas por las autoridades.
Orly, el segundo aeropuerto internacional de París, logra mantener el programa previsto. Sin embargo, sufre de retrasos.
Bélgica
Zaventem, el aeropuerto internacional de Bruselas, mantuvo sus pistas cerradas durante casi 24 horas, a causa de helamiento y dejó en tierra a miles de pasajeros. Los hoteles que rodean el aeropuerto están llenos. Las autoridades de Zaventem se vieron obligadas a dirigirse por asistencia a las Fuerzas Armadas de Bélgica y a la Cruz Roja, que instalaron camas plegables de campaña para acoger a los pasajeros en las terminales.
Dinamarca
El Ejército nacional tuvo que intervenir en el combate contra la nieve también en Dinamarca. El grosor de la capa de nieve en el país llegó a unos 15 centímetros. La mayoría de las autopistas resultaron bloqueadas, lo que hizo a los habitantes locales a 'olvidarse' de visitar a sus amigos esta noche para celebrar la Navidad. Los servicios de emergencia no son capaces de remediar el elemento. Les están ayudando los vehículos blindados de combate.
En la isla de Bornholm fueron declarados como desaparecidas tres personas. Centenares de turistas que estaban visitando la isla no tuvieron ninguna oportunidad de abandonarla a tiempo, para celebrar Navidad en el continente. Están festejando en salas de deporte y en cuartelillos militares.
Alemania
En las autopistas de Alemania registraron centenares de accidentes de tráfico. La circulación ferroviaria colapsó totalmente en el norte y el este del país. Por congelación de la catenaria, la vía entre Berlín y Hannover, una de las arterias principales del Estado, permaneció cortada durante la mañana. Centenares de pasajeros fueron evacuados.
A la vez, fueron suspendidos más de cien vuelos en el aeropuerto de Düsseldorf, el tercero más grande del país. Sufre anulaciones y retrasos también el vecino aeropuerto de Weeze y permanece casi cerrado el aeropuerto de Dortmund.
El aeropuerto de Fráncfort, el de mayor tráfico de toda Europa, sufre de retrasos y cancela vuelos a las destinaciones en las que no son capaces de aterrizar los aviones, París en primer lugar.
Reino Unido
Casi todos los aeropuertos del país operan, aunque con retrasos. Los más desafortunados resultaron ser los pasajeros del aeropuerto de Dublín, que durante varias horas permaneció totalmente cerrado a causa de unas 120.000 toneladas de nieve acumulada que no lograban combatir. Resultaron afectados unos 40.000 pasajeros.
En el Reino Unido, las fuertes nevadas y el frío casi polar causan problemas, principalmente, a los automovilistas. Miles de personas no lograron unirse con sus familias y amigos para celebrar la Navidad.
Italia
Las fuertes lluvias en el norte de Italia no permiten anular el estado de alerta, de modo que falla el funcionamiento de los aeropuertos de Venecia y Milán. Varios ríos se han desbordado y el 50% del territorio veneciano sufre de agua alta. Los residentes de la localidad Vicenza fueron evacuados a causa de la inundación. El viento y el mal estado del mar han obligado a interrumpir también algunas comunicaciones marítimas.
Rusia
Los aeropuertos de Moscú funcionan con toda la normalidad: teniendo en cuenta las peculiaridades del clima en Rusia, en la mayoría de los casos están equipados para remediar las nevadas. Sin embargo, el colapso del tránsito afectó las autopistas. Este 24 de diciembre, la capital rusa estableció un récord bastante peculiar: el total de los atascos que bloquearon las carreteras moscovitas llegó a unos 3.000 kilómetros de largo. La cifra equivale a la distancia entre Moscú y Sharm el-Sheij, uno de los balnearios más famosos de Egipto. El alivio fue que en Rusia los días 24 y 25 de diciembre no son oficialmente festivos, pues la Navidad ortodoxa cae en el 7 de enero.
EE. UU.
A pesar de que por el momento los aeropuertos estadounidenses no sufren problemas 'medioambientales', sus pasajeros tanto locales como internacionales sufren hoy demoras y colas enormes. Respecto a la Navidad, las autoridades del país introdujeron medidas adicionales de seguridad frente a las posibles amenazas de atentado terroristas.