Dos destacados militares forman un nuevo Gobierno en Egipto
El presidente egipcio Hosni Mubarak sorprendió a la oposición, que ha repetido este sábado otra 'jornada de ira' al salir a las calles de las principales ciudades, con la designación a los puestos claves en su Gobierno a dos militares de alto rango.
El mariscal de aviación, Ahmed Mohamed Shafik, ha sido nombrado primer ministro de Egipto para remodelar el gabinete, según prometió el mandatario a su nación en la intervención televisada de la noche pasada. Nacido en El Cairo en 1941 Shafik se enroló en la Fuerza Aérea egipcia para graduarse luego en la Academia del Aire (1961). Como piloto de combate, sirvió en varias contiendas bélicas contra el Estado de Israel entre ellas la del Yom Kippur en 1973. Posteriormente, de acuerdo con los datos biográficos citados por la agencia EFE, fue agregado militar de la embajada de Egipto en Roma (1984-1986) y jefe de Operaciones del Ejército del Aire (1991-1996).
Sus cuarenta años de carrera militar culminaron con su nombramiento como comandante en Jefe de la Fuerza Aérea en abril de 1996 y ministro de Aviación Civil en 2002. Desde este puesto dirigía la modernización de los aeropuertos del país, obra que es apreciada por todos los turistas que hayan visitado los centros egipcios del interés turístico.
Por primera vez a lo largo de casi 30 años de su mandato Mubarak designó a un vicepresidente. Este cargo lo ocupó el general Omar Suleimán, jefe de los servicios secretos egipcios.
Suleimán nació en 1936 en la ciudad de Qena (sur del país), en el seno de una familia humilde. Se alistó en el Ejército en 1954, luego de que estudió y recibió entrenamiento en la Academia Militar de El Cairo. Completó su formación en la Unión Soviética a donde viajó en los años 1960. Como militar, tenía misiones especiales en Yemen. En 1993 fue nombrado director de los Servicios de Inteligencia de Egipto (EGIS). Este fue el momento de máxima actividad de grupos islamistas como Gama'a Islamiya, que realizaban una campaña de asesinatos y atentados contra el sector turístico. Cercano al presidente saliente, ha jugado un importante papel en la diplomacia del país, especialmente en los períodos de la reconciliación con Israel.
El último vicepresidente de Egipto fue el propio Hosni Mubarak, quien ocupó el cargo hasta el asesinato, por los radicales islamistas, de Anwar al Sadat. Le sucedió en la cima política el 14 de octubre de 1981.
Aunque la configuración completa del gabinete se desconoce todavía, no quedan dudas de que este es un típico gobierno militar. Los importantes nombramientos tienen lugar cinco días después de que se desataran protestas masivas en las más importantes ciudades del país, cuyos participantes exigían la dimisión de Mubarak.