INFORME SEMANAL DEL MINISTERIO DE RELACIONES EXTERIORES DE RUSIA

El jefe del Departamento de Información y Prensa del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Alexandr Lukashévich, analizó los objetivos más importantes de la diplomacia rusa durante esta semana.

Sobre los extremistas caucásicos

Lukashévich señaló que Rusia considera no fundamentadas las objeciones de EE. UU. en cuanto a la inclusión del líder de los extremistas del Cáucaso de Norte, Doku Umárov, en la lista de sanciones de la ONU.

El consintemiento de Estados Unidos de incluir a Umárov en la lista de personas susceptibles de sanciones de Naciones Unidas “respondería tanto a intereses de la lucha antiterrorista en general, como al afianzamiento de las relaciones de colaboración antiterrorista ruso-estadounidense”, señaló.

En noviembre del 2010 Rusia propuso al Comité de la ONU de sanciones contra las organizaciones involucradas en la actividad terrorista para que incluyera en su lista a Doku Umárov y a la organización terrorista “Emirato caucásico” que él encabeza.

“No obstante los argumentos presentados por la parte rusa evidenciaron de modo convincente que Umárov y el llamado 'Emirato Caucásico' mantienen estrechos vínculos con Al-Qaeda y el movimiento Talibán. El comité postergó la toma de decisión al respecto por iniciativa de Estados Unidos”, recalcó el portavoz de la cancillería rusa y recordó que el año pasado el Departamento de Estado norteamericano incluyó a Doku Umárov en la lista de terroristas internacionales más buscados.

Asimismo, Moscú se mostró indignada por la invitación al exterrorista Ilyas Ajmádov a intervenir en la universidad estadounidense Johns Hopkins.

“Nos causó perplejidad e indignación habernos enterado de que la Universidad Johns Hopkins de EE. UU. había ofrecido su tribuna al exparamilitar y ayudante del terrorista internacional Basáev”, señaló Lukashévich y agregó “más aún que se trata de un criminal con orden de detención internacional. Lamentablemente este sujeto hasta ahora figura en los formularios estadounidenses como un refugiado.”

Sobre las relaciones ruso-japonesas

Además, el portavoz de la cancillería rusa confirmó oficialmente que su país no lleva a cabo negociaciones acerca del litigio territorial ruso-japonés en torno a las islas Kuriles.

“Durante reuniones regulares y consultas ruso-japonesas, de vez en cuando se estudian perspectivas de concluir el tratado de paz y formas de resolver el así llamado problema territorial”, dijo. “Pero no se llevan a cabo negociaciones acerca del problema. No se puede hablar sobre conversaciones puesto que nuestras posiciones son diametralmente opuestas”, afirmó el diplomático.

"Lamentablemente en Japón están predominando las ideas radicales, abogadas por funcionarios estatales de más alto rango incluyendo al primer ministro”, destacó Lukashévich y añadió: “en esta situación no tiene sentido llevar a cabo conversaciones”.

Sobre las relaciones con Georgia

Moscú es escéptica en cuanto a la reciente declaración del presidente georgiano Mijaíl Saakashvili sobre su supuesta disposición a iniciar un diálogo con Rusia, hecho declarado por el mandatario georgiano al hablar en el Parlamento nacional.

"No creo que hay que tomar en serio estas declaraciones puesto que normalmente van acompañadas por una burda retórica antirusa e invectivas ofensivas y poco diplomáticas contra Rusia. Bastaría con recordar [...] su discurso en directo transmitido hace poco en el canal televisivo 'Primer Nacional Caucásico' en que calificó a Rusia de un enemigo con el cual tiene que negociar”, dijo.