El Senado extiende los poderes de la ley antiterrorista
El Senado estadounidense prorrogó 90 días más la autorización de las autoridades de vigilar a ciudadanos norteamericanos y extranjeros con el fin de prevenir el terrorismo. Esta atribución está incluida en la controvertida Acta Patriótica antiterrorista, adoptada después de los ataques del 11 de septiembre de 2001.
Por 86 votos a favor y 12 en contra los senadores votaron extender la vigencia de esta ley que permite la vigilancia de los sospechosos de terrorismo, incluida la intervención de las conexiones telefónicas.
Sin embargo, la ley provoca muchas críticas por parte de diversos sectores de la sociedad norteamericana y de algunos legisladores por haber suspendido, según ellos, la vigencia de los derechos humanos y las libertades civiles en los Estados Unidos. Por ejemplo, la Unión estadounidense para las Libertades Civiles (ACLU, en inglés) ha condenado el alcance de la ley por dar a las autoridades atribuciones "demasiado amplias" y fuera de las garantías constitucionales.
Vigilancia nacional
Anteriormente, la Cámara de Representantes de EE. UU. aprobó una extensión de la ley antiterrorista hasta el próximo 8 de diciembre. Los legisladores aprobaron la extensión de diez meses con 275 votos a favor y 144 en contra. Un total de 27 republicanos y 117 demócratas votaron en contra.
Ahora, las dos cámaras tendrán que llegar a un acuerdo en lo relativo a los plazos de la extensión de la ley. La Casa Blanca insiste en que estas medidas excepcionales sean extendidas hasta diciembre de 2013.
El Acta Patriótica, impulsada por el presidente George Bush, fue aprobada por una abrumadora mayoría, tanto por la Cámara de Representantes como por el Senado estadounidense, después de los atentados del 11 de septiembre de 2001.
El objetivo de esta ley es ampliar la capacidad de control del Estado con el fin de combatir efectivamente el terrorismo, mejorando la capacidad de las distintas agencias de seguridad estadounidenses al coordinarlas y dotarlas de mayores poderes de vigilancia. Asimismo, la ley promulgó nuevos delitos y endureció las penas por delitos de terrorismo.
La ley antiterrorista de 2001 contiene tres cláusulas principales. Una es la 'vigilancia móvil' que permite la vigilancia simultánea de diversos dispositivos electrónicos. Otra medida da a la Oficina Federal de Investigaciones acceso a archivos empresariales, como los correos electrónicos o datos bancarios privados al amparo de una investigación. La tercera medida permite vigilar a los denominados 'lobos solitarios' o extranjeros sospechosos de terrorismo que no tienen vínculos con grupos extremistas.
El Acta Patriótica fue fundada con el argumento de que tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 la nación estadounidense debía elegir entre su seguridad y sus derechos constitucionales.