Obama deja de defender la ley contra el matrimonio homosexual
La administración de Barak Obama no va a impedir el cambio de la Ley de Defensa del Matrimonio (DOMA, por su sigla en inglés), que establece -en el marco de la legislación federal- el matrimonio como un vínculo jurídicamente formalizado entre el hombre y la mujer.
La nueva postura de las autoridades fue comunicada al Congreso por el fiscal general Eric Holder. Él ha anunciado que, al analizar el Acto minuciosamente, el gobierno llegó a la conclusión de que alienta los derechos de las minorías sexuales y los abogados del gobierno deben dejar de defenderlo en los tribunales.
El Acto mencionado fue aprobado en 1996 y hasta ahora prohibía al gobierno federal reconocer los matrimonios homosexuales como legítimos, aún si estos eran legales en algún estado norteamericano. Por eso, las personas que han registrado un matrimonio homosexual donde es posible oficialmente (Connecticut, Massachusetts, Iowa, Nuevo Hampshire, Vermont y el Distrito de Columbia), no obtienen franquicias tributarias como los cónyuges heterosexuales.
La decisión de Obama fue inmediatamente elogiada por los activistas defensores de los derechos de las minorías y los propios gays y lesbianas.
Diane Olson y Robin Tyler, la primera pareja en cuestionar la legitimidad de la Ley de Defensa del Matrimonio ante el tribunal, ha calificado la reciente decisión del presidente como una “gran victoria”. “Estamos en las nubes al oír que el presidente califica DOMA como anticonstitucional. Somos una pareja casada, pero estamos privados de los beneficios federales, y el hecho de que la administración por fin haya dicho que la privación de los beneficios contradice la igualdad ante la ley es un gran paso adelante”.
Con todo esto, el gobierno seguirá haciendo cumplir la ley hasta que sea revocada o eliminada.