EE. UU. investigará una operación de contrabando de armas hacia México
Eric Holder, procurador de Estados Unidos, ordenó el viernes investigar una polémica operación “Rápido y Furioso”, diseñada para atrapar a los traficantes de armas compradas en su país y enviadas ilícitamente a México.
El hecho se dio a conocer cuando un agente federal de Estados Unidos, identificado como John Dodson y que fue asignado desde el 2010 a la oficina de su agencia en Phoenix, en el estado de Arizona (EE.UU.), fronterizo con México, declaró que mediante una operación de la Oficina estadounidense de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF) recibió órdenes de sus superiores para que miles de armas de asalto pasaran a México, dentro de una operación aprobada por el Gobierno de EE.UU.
El agente reveló que la ATF emprendió la operación “Rápido y Furioso”, aprobada por el Departamento de Justicia, con el fin de rastrear las actividades del narco y dejar que las armas fluyeran a través de la frontera. Toda la operación se mantuvo en secreto sin informar a México.
Dodson aseguró que le habían ordenado que “se quedara quieto y observara lo que sucedía”, aunque sus jefes niegan haberle dado tales ordenes y que ahora el agente “pone en riesgo su empleo al salir a la luz pública”.
En el transcurso de dicha estrategia el trabajo de Dodson consistía en el impedimento del contrabando de armas a través de la frontera. En cambio, Dodson asegura que le han ordenado que se quede quieto y observe lo que ocurre.
Desgraciadamente, la estrategia no dio resultados. La agencia se negó a escuchar las exigencias de sus efectivos, que hablaban de las graves consecuencias que la operación podía llevar consigo, respondiendo que "si se quiere hacer un omelette, deben romperse algunos huevos".
La cadena CBS indicó que los agentes de la ATF grabaron imágenes en las que se ve a supuestos contrabandistas comprando armas y cargando los equipos.
Como resultado de la operación “Rápido y furioso” ninguna persona ha sido detenida, y según Dodson, miles de armas que son parte de la misma, siguen en las calles de México.
Por su parte, la ATF realiza una investigación interna para evaluar sus operativos para combatir el tráfico de armas en la frontera con México.