Las autoridades de Japón informaron en un comunicado que ya terminaron de poner la red de transporte de energía eléctrica hacia el reactor número dos de la central nuclear Fukushima-1. Los especialistas planean ponerla en funcionamiento después de que haya finalizado la operación de arrojar agua al reactor número tres.
Las autoridades niponas decidieron no continuar la operación de arrojar agua desde vehículos especiales hacia el tercer bloque de la planta nuclear en crisis, Fukushima-1. La decisión se tomó por el riesgo que los altos niveles de radiación representan para la salud del personal en la zona, según informó el canal NHK.
Este jueves se estaban efectuando las labores de arrojar agua hacia el tercer bloque de la planta. En la operación participaban helicópteros de las fuerzas de autodefensa de Japón, junto con vehículos especiales dotados de potentes cañones de agua.
Después de la operación fue registrado un aumento de 3,7 microsieverts en los niveles de radiación hasta alcanzar los 4.000 microsieverts por hora.