Los especialistas de Japón registraron niveles elevados de radiación en la leche y espinaca en regiones cercanas a la planta nipona averiada, según informó este sábado el jefe de gabinete del Gobierno de Japón, Yukio Edano. Él subrayó que el nivel de radiación observado puede presentar peligro para la salud, aunque aseguró que la contaminación "no supone un riesgo inmediato".
Además, afirmó que se tomarán las medidas adecuadas y no descarta posibles limitaciones en la distribución de productos de la zona.
Se informa que la empresa-operadora de la planta nuclear averiada Tokyo Electric Power (TEPCO) aceleró hoy sus esfuerzos para restablecer la electricidad que alimenta al sistema de refrigeración de Fukushima.
Los especialistas de TEPCO planean poder alimentar con electricidad el sistema que bombea agua a dos reactores, aunque la entrada en funcionamiento no será inmediata ya que los equipos necesitan ser revisados antes, según informan representante de la compañía.
Además, la Agencia de Seguridad Nuclear de Japón informó que hoy se planea instalar los cables que alimentan la refrigeración de los reactores número uno y dos de la planta nuclear.
Por añanidura, los especialistas japoneses detectaron yodo radiactivo en el agua de grifo en Tokio, sus cercanías y otras ciudades de Japón, según informa la agencia Kyodo citando fuentes gubernamentales.
No obstante, las autoridades locales informaron a la población que el nivel de contenido radiactivo en el agua no presenta peligro para la salud de las personas.
La situación más alarmante se mantiene alrededor del tercer bloque de la planta nuclear Fukushima-1
Camiones de bomberos japoneses reanudaron las labores de inyección de agua fría al reactor número tres de la planta nuclear Fukushima-1, que fueron interrumpidas anteriormente, según informa la empresa Tokyo Electric Power.
Así, continúa el lanzamiento de agua al reactor número tres, en donde no funciona en absoluto el sistema de enfriamiento. En este reactor se mantiene la situación más peligrosa puesto que allí el 14 de marzo se produjo una explosión que dañó gravemente el edificio. Dos días después, sobre este bloque se observó humo blanco que, al parecer, era vapor proveniente de agua hirviendo en la piscina del reactor.
Las autoridades niponas informan que a lo largo de la jornada de este sábado se planea que camiones cisternas arrojen 1.260 toneladas de agua.
El aumento de la temperatura en las piscinas de almacenamiento de combustible nuclear usado reduce el nivel del agua que mantiene estable las barras de material radiactivo, con el consiguiente riesgo de fusión y emisión masiva de radiación.
El Gobierno japonés fijó una zona de evacuación de 20 kilómetros alrededor de la central, mientras que las personas que habitan a menos de 30 kilómetros de la planta deben permanecer en sus casas con puertas y ventanas cerradas.
La cantidad de víctimas mortales tras el sismo destructor que golpeó Japón el 11 de marzo aumentó hasta las 7.320 personas, según informa hoy la cadena NHK. La cifra de personas desaparecidas se estima en más de 11.000 personas.