Según han anunciado fuentes diplomáticas en la sede de la OTAN, EE. UU. en los próximos días cederá el mando de la operación en Libia.
Aunque por ahora no hay claridad de quién asumirá el liderazgo, varias fuentes han comunicado que en Bruselas se baraja la posibilidad de crear ‘un mando internacional especial’ con el uso ‘de sistemas de mando y control de la OTAN’, aunque sin la incorporación oficial de la Alianza en la operación.
Mientras tanto, estos datos no se han confirmado ni desmentido oficialmente, comunica la agencia rusa Itar-Tass. Los expertos militares europeos destacan que la creación de dicha estructura será ‘un problema extremamente difícil, sobre todo en las condiciones de una operación militar en curso’.
Entre los temas que no suscitan desacuerdos en el seno de la Alianza figura el embargo de armas, al igual que los fines humanitarios de la operación. Según declaró un funcionario de la OTAN, ‘la Alianza ha llegado a un acuerdo sobre las medidas de bloqueo y para controlar el embargo de armas a Libia’.
Al mismo tiempo, los expertos aseguran que las cuestiones mencionadas carecen de sentido práctico en el momento en que no están del todo claros los objetivos, los métodos ni las condiciones del cese de la operación en Libia, al igual que no está nada definida la estructura y el comando de la coalición, comunica Itar-Tass.
Posición de Rusia
El Presidente de Rusia, Dmitri Medvédev, en el encuentro de hoy con el ministro de Defensa de EE. UU., Robert Gates, expresó su preocupación y señaló que no se está cumpliendo debidamente la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU sobre la zona de exclusión aérea en el territorio libio.
El Kremlin también comunicó que Medvédev volvió a confirmar que Rusia está dispuesta a ejercer el papel de mediador en la resolución del conflicto. “Rusia no tomará parte en las acciones de la coalición de algunos estados respecto a Libia y esto no se discute”, subrayaron desde el Kremlin.
Al mismo tiempo el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, comunicó que Rusia sigue insistiendo en que los estados implicados en el cumplimiento de la resolución 1973 de la ONU, que dio luz verde a una operación militar en Libia, deben dedicarse exclusivamente a la defensa de la población civil, asumiendo además la totalidad de responsabilidades en este ámbito.
“La observación del derecho internacional debe ser el criterio prioritario”, subrayó el ministro en conferencia de prensa.
“Debemos evitar que con las políticas de doble rasero estemos agravando la situación, provocando la violencia’, dijo el ministro, destacando al mismo tiempo que Rusia no hace la vista gorda sobre los defectos que contiene el texto de la resolución. Según Lavrov, la resolución formula sin ambigüedades el objetivo de la zona de exclusión aérea, proteger a la población civil.
Lavrov también anunció que durante las consultas planeadas para el 24 de marzo en el Consejo de Seguridad de la ONU se debatirá la objetividad con que se cumple la resolución 1973, al igual que se oirá el informe del Secretario General de la ONU sobre su reciente visita a Libia.
Situación actual en Libia
Mientras tanto el ejército leal a Muammar Gaddafi realizó hoy un nuevo intento de recuperar el pleno control de las ciudades, situadas al este y al oeste de Trípoli. Según han anunciado los medios occidentales y los canales árabes, como resultado de los disparos de los tanques de las fuerzas del régimen en la ciudad de Misrata, al noroeste del país, perecieron más de 40 personas.
El ejército emprendió además ataques con el uso de armamento pesado contra los defensores de la ciudad Ez-Zintan, a 140 Km. de Trípoli. Centenares de personas se vieron obligadas a abandonar precipitadamente la ciudad, buscando refugio en las zonas montañosas, próximas a los escenarios del conflicto.
A su vez los rebeldes, aprovechando los bombardeos protagonizados por la aviación de la coalición occidental en el oeste del país, se preparan para hacerse con el control de Ajdabiya, ciudad estratégica situada a 150 Km. al sur de Bengasi.