Al menos una persona ha muerto y 31 resultaron heridas tras una explosión en Jerusalén. La explosión tuvo lugar cerca de dos autobuses en las cercanías del Centro Internacional Convencional, frente a la estación central de la ciudad, informa el periódico israelí Haaretz.
Entre los 31 heridos 2 fueron lesionados de gravedad; todos ellos fueron transferidos al hospital Hadassah. La detonación rompió las ventanas de dos autobuses que estaban llenos de gente. La bomba, aparentemente, fue escondida en una bolsa cerca de una cabina telefónica.
Las fuerzas de seguridad cerraron la entrada a la ciudad; la policía estuvo peinando el lugar del atentado en busca de más explosivos. La Media Luna Roja de Palestina contactó los servicios de emergencia locales y propuso su asistencia en evacuación de los heridos.
La explosión sucedió solo unas horas después del lanzamiento de dos cohetes desde la Franja de Gaza hacia la ciudad de Beer Sheva y la caída de varios proyectiles en la localidad de Negev.
Tras los acontecimientos, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, canceló su viaje a Moscú.