La oposición libia, dispuesta a un alto el fuego pero con condiciones
El jefe del Consejo Nacional opositor de Libia, Mustafa Abdul Yalil, declara estar dispuesto a anunciar el alto el fuego. A cambio, los sublevados exigen el cumplimiento de una serie de condiciones. Así, se insta a que las tropas del régimen se retiren de las ciudades del oeste y los mercenarios extranjeros, supuestamente contratados por Gaddafi, y el líder libio con su familia abandonen el país. "Con estas condiciones no estaremos en contra de concertar un armisticio", aseveró Yalil.
Al mismo tiempo confirmó que en el caso de la continuación de las acciones militares, la oposición necesitará armas adicionales.
El cese inmediato del fuego es una de las exigencias a ambas partes del conflicto que figuran en la resolución de la ONU sobre Libia.
Anteriormente fue Trípoli quien anunció varias veces el alto el fuego unilateral, sin embargo las acciones militares se reiniciaban de nuevo.
Las condiciones de la oposición fueron anunciadas el mismo día que el embajador especial del secretario general de la ONU mantuvo una reunión con los insurgentes. Entre tanto, algunos medios británicos afirman que el asesor de uno de los hijos de Gaddafi estaría negociando con Londres.
Según los medios mundiales, el viaje de Ismail, ayudante de Saif al Islam Gaddafi, a Londres es una de las etapas de las negociaciones entre el gobierno libio y el Occidente, con las cuales el régimen libio en las últimas semanas intenta encontrar la salida de la situación complicada en el país.
Un papel importante en las negociaciones juegan los hijos de Muammar Gaddafi que, según unas fuentes cercanas a la familia, entre otras ideas, investigan la posibilidad de “hacer salir del juego” a su padre, para evitar un cambio radical del gobierno en el país.
Por otra parte, una fuente en la Administración estadounidense informa también de que agentes de la CIA están realizando labores de inteligencia en el país árabe. La labor secreta habría empezado incluso antes de que Barack Obama supuestamente autorizara tal medida. Algunos expertos sostienen que la iniciativa de Washington de enviar a sus agentes secretos al territorio norteafricano, significaría que EE. UU. busca remediar lo que con otras operaciones en la región no ha podido lograr.