Por primera vez desde que se produjo el sismo de 9 grados en la escala de Richter y el posterior tsunami en Japón, el primer ministro del país, Naoto Kan, ha visitado la zona de evacuación de Fukushima. Llegó a Rikuzentakata (Iwate), una localidad de unos 25.000 habitantes de las más afectadas por el desastre.
Durante su visita el mandatario se reunió con los evacuados para expresarles su apoyo. Naoto Kan aseguró a los afectados que la Administración del país les proporcionará la ayuda necesaria para reconstruir sus casas y reanudar sus actividades. Dijo que el Gobierno estará con ellos "hasta el final".
Tras visitar Rikuzentakata, el primer ministro se dirigió a una base de operaciones próxima a la central nuclear de Fukushima-1. Llegó a la base, situada a unos 20 kilómetros de la planta, en un helicóptero de las Fuerzas Aéreas. Kan se reunió con los empleados de la compañía operadora de la planta nuclear, Tokio Electric Power, y de la Agencia Nacional de la Seguridad Nuclear e Industrial.
"La situación en la central averiada puede ser corregida solo con sus esfuerzos colectivos. Tenemos que aplicar todas las fuerzas para que nuestro país supere las consecuencias del sismo devastador", declaró el primer ministro.
Todavía sigue sin saberse la cantidad exacta de víctimas producidas por el desastre natural. Ya está confirmada la muerte de al menos 11.800 personas, y alrededor de 16.000 permanecen desaparecidas en el norte del país.
Descubren una fuga de agua radiactiva al mar
La situación en la central de Fukushima-1 continúa siendo difícil. Recientemente se descubrió una grieta en la base de cemento del segundo bloque de energía de la central nuclear por la que sale agua radiactiva, que desemboca a través de un arroyo al mar. Este hecho fue confirmado por los oficiales nipones a la agencia local Kyodo.
Según los especialistas, la concentración de radiactividad en este agua es de 1.000 mSv por hora. Las últimas pruebas del agua del mar cerca de Fukushima-1 demostraron que la concentración de yodo radiactivo allí supera la media normal en 4.385 veces y en las aguas subterráneas, en 10.000 veces.
Los empleados de Fukushima-1 tienen previsto para hoy cubrir de hormigón la grieta.
El director general de la Agencia Internacional de la energía nuclear, Yuki Amano, comentó que se necesitaría "más tiempo del que piensan muchos" para estabilizar la situación.