El 11 de abril se celebra el Día Internacional de la Liberación de los Prisioneros de los Campos Fascistas. En esta fecha del año 1945 los presos de Buchenwald, uno de los campos de concentración más grandes en territorio alemán, se sublevaron contra los guardias y lograron tener éxito.
El levantamiento comenzó después de largas preparaciones (los participantes de la organización clandestina produjeron armas en las fábricas del campo y las escondieron bajo el suelo de la enfermería). El plan de los nazis de transportar a los reclusos de Buchenwald fracasó a causa de la aproximación de las fuerzas aliadas.
El 11 de abril, cuando las tropas estadounidenses entraron en el territorio de Buchenwald, los presos ya habían establecido el control total sobre el campo, matando y capturando a más de 800 personas entre miembros de la administración y la guardia. Gracias a este levantamiento, cerca de 112.000 personas se salvaron del exterminio ya que en la víspera del 11 de abril se había tomado la decisión de matar a todos los prisioneros.
En 1946, la ONU nombró al 11 de abril como Día Internacional de la Liberación de los Prisioneros de los Campos Fascistas.
Durante la II Guerra Mundial, en la Alemania nazi y en los territorios ocupados funcionaron 14.000 campos de concentración. Sus prisioneros fueron forzados a trabajar, torturados, exterminados en cámaras de gas y en crematorios. Además, se realizaron numerosos experimentos médicos con ellos. Se estima que, en total, en los campos de concentración nazis murieron más de 11 millones de personas (incluidos 5 millones de ciudadanos soviéticos).
Desde hace mucho tiempo cada 11 de abril los familiares de las víctimas de los campos de concentración nazis se reúnen en el territorio de Buchenwald para conmemorar a los que fallecieron en ese campo. En otros lugares del mundo también celebran esta fecha, incluso en Rusia. Durante este día en muchas ciudades rusas tradicionalmente se realizan manifestaciones y actos conmemorativos. Este año se debate la idea de organizar en San Petersburgo un museo dedicado al prisionero de un campo de concentración.