La compañía operadora de Fukushima-1, TEPCO, propuso un plan para liquidar la crisis en la planta nuclear. Según este, se puede restaurar la refrigeración de los reactores nucleares dañados pero hará falta casi un año para hacerlo.
Durante la primera etapa que durará tres meses, los reactores nucleares y las piscinas de combustible usado van a recuperar su sistema de refrigeración. También esperan minimizar el escape de sustancias radioactivas.
En la segunda etapa, de entre seis y nueve meses de duración, los reactores serán estabilizados totalmente por medio del procedimiento que se llama "parada fría", un apagado total de los reactores. Luego la empresa japonesa prevé cubrir los edificios de los tres reactores dañados con materiales protectores.
TEPCO espera comenzar en verano el proceso de refrigeración de los reactores y drenar, a la vez, agua contaminada. El nuevo sistema limpiará el líquido y después lo reutilizará para evitar que se acumule agua radiactiva en los edificios de los reactores, el problema hasta ahora.
Tsunehisa Katsumata, el presidente de TEPCO, pidió perdón por la crisis provocada y dijo que su empresa está tratando de evitar el empeoramiento de la situación.
El accidente resultó del devastador tsunami del 11 de marzo en la costa noreste de Japón. La crisis en la central nuclear alcanzó el máximo nivel de 7, el mismo que el de Chernóbil en 1986.