Violentos enfrentamientos siguen calentando Oriente Medio donde la gente, sin descanso y a pesar de la fuerza aplicada con frecuencia por la policía, sale a las calles para manifestarse de nuevo contra sus gobiernos en demanda de reformas políticas.
Al menos 35 heridos, entre ellos siete policías, resultaron heridos el domingo en Suleimania, en el norte de Irak, en los enfrentamientos entre los ciudadanos y las fuerzas de seguridad que abrieron fuego contra la muchedumbre.
El mismo día las fuerzas yemeníes leales al presidente dispararon contra una protesta en Saná e hirieron al menos a 22 personas, y cerca de 200 más se vieron afectadas por el gas lacrimógeno. Los testigos indican que hombres armados no identificados irrumpieron en la manifestación y empezaron a disparar al aire. Los policías intentaron dispersar a los protestantes con gases lacrimógenos mientras que algunas personas les lanzaban piedras.
La oposición yemení: Saleh debe irse en dos semanas
Este domingo en Riad se celebró una reunión de Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo (CCEAG) para fijar las condiciones antes de iniciar negociaciones formales para la salida del presidente Ali Abdullah Saleh. La oposición, encabezada por el exministro de Exteriores, Mohammed Basindwa, se manifestó en contra del plan de los ministros del Golfo ya que no incluía una rápida transición. La oposición exige que Saleh se vaya en dos semanas sin pasar el poder a nadie.
"Queremos que [Saleh] presente la dimisión y no pase el poder al vicepresidente, al irse puede hacer lo que quiera. Si prefiere abandonar Yemen y vivir en otro país, es su asunto", dijo el representante de la oposición yemení, Sultán al-Atwani. Sin embargo, el opositor se abstuvo de comentarios sobre qué destino espera a Saleh si se queda en Yemen.
Hace una semana los ministros de Exteriores de los países del Consejo de Cooperación del Golfo Pérsico (CCG), solicitaron al presidente Saleh que dejara el poder. Saleh aceptó el plan de los ministros que suponía una entrega pacífica del poder a su vicepresidente Abdarabu Mansur Hadi.
Hace justamente un mes, el 18 de marzo, debido a las protestas masivas antigubernamentales, Saleh declaró el estado de emergencia en Yemen para 30 días. El estado de emergencia fue introducido después de crueles enfrentamientos entre los manifestantes y los servicios de seguridad en Saná, donde según los medios extranjeros perecieron más de 50 personas y otras 300 resultaron heridas.
Omán planea gastar 2.600 millones de dólares para satisfacer las exigencias
El Gobierno del sultán Qaboos bin Saíd, un aliado de EE. UU. que está en el poder desde hace 40 años, prometió un paquete de medidas después de casi dos meses de manifestaciones antigubernamentales, inspiradas en los disturbios ocurridos en otros países árabes contra los regímenes autocráticos. El sultán tiene previsto destinar 2.600 millones de dólares para satisfacer las exigencias de las reformas políticas que exige la oposición del país.
"Omán planea gastar 1 billón de riales omaníes para satisfacer las demandas de los manifestantes y también para mejorar las condiciones de su pueblo", se dice en el mensaje de Qaboos bin Saíd.
Las protestas que sacudieron Omán se han centrado ante todo en exigir mejores salarios, más empleo y terminar con la corrupción. Omán es uno de los países del Golfo Pérsico que se manifiesta por la dimisión del presidente yemení, Alí Abdalá Saleh.
Seis policías muertos en supuestos ataques de extremistas islámiscos en Argelia
El domingo pasado seis empleados de las Fuerzas de Seguridad de Argelia fueron asesinados durante los ataques realizados, supuestamente, por los extremistas islámiscos.
Según las fuentes oficiales, cinco soldados fueron asesinados durante el patrullaje de las afueras de Boumerdés tras caer en una emboscada. A unos 12 kilómetros de este lugar, en la ciudad de Bouira, otro grupo de insurgentes asesinó a un jefe de la policía argelina y dejó a dos policías heridos. Los ataques del domingo pasaron dos días después de que al menos 13 soldados murieran a manos de un grupo de rebeldes en una emboscada contra una base militar. Tras explorar una bomba en el camino del convoy, los rebeldes abrieron fuego.
Previamente el estado expresaba su preocupación de que desde Libia pudieran penetrar al país grupos de combatientes de Al Qaeda, y esta semana el presidente, Abdelaziz Buteflika, anunció en un discurso a la nación una próxima reforma de la Constitución con vistas a "reforzar la democracia".