El Gobierno de Japón prohibió la entrada en un radio de 20 kilómetros alrededor de la estación nuclear averiada Fukusima-1.
Según el Ministerio de Ciencia e Innovación del país, la radiactividad en la zona de 20 kilómetros alrededor de la central nuclear equivale en promedio a 100 mZv por hora, lo que supera la media en 500 veces.
Desde finales de marzo los especialistas del Ministerio han medido la radiación en 150 diferentes puntos de la zona. El índice más alto registrado es 124 mZv por hora, mientras que la media permitida para un adulto es de 0,05 a 0,2 mZv por hora.
En el Ministerio precisó que “estos datos todavía no han sido publicado por mandato de la cancillería del primer ministro nipón”.
La decisión de crear la zona de exclusión legal fue tomada por la administración nipona al constatar que más de 60 familias, que vivían en el radio de 20 kilómetros de Fukusima-1, se negaban a cumplir con la orden de evacuación dictada por el Ejecutivo y abandonar sus casas. Previamente a los ciudadanos evacuados se les recomendó no volver a sus casas para no someterse al peligro, sin embargo varios habitantes regresaban a la zona para buscar sus pertenencias.
"La situación en la central no es estable", declaró el secretario general del Gobierno de Japón, Yukio Edano.
Ahora se permitirá a solo una persona de cada familia ingresar en la zona por unas dos horas para recoger todas las cosas necesarias y a partir de la medianoche el jueves, hora local, a los habitantes se les prohibirá estrictamente entrar en la zona, salvo con un permiso especial.
El portavoz del Gobierno nipón añadió que en breve serán evacuados también los ciudadanos de otras localidades próximas, aunque situadas fuera de la zona de 20 kilómetros de Fukusima-1, sin embargo no dio más detalles.
Previamente se informó que en el radio de 30 kilómetros de Fukusima-1 vivían alrededor de 48.000 familias. La compañía operadora de Fukusima-1, Compañía Eléctrica de Tokio (Tepco), ya ha iniciado los pagos de las compensaciones a quienes se vieron obligados de abandonar sus casas debido a la liberación de radiactividad.
Tepco pagará 12.000 dólares por cada hogar que tuvo que ser abandonado. Sin embargo, se trata sólo de los pagos preliminares, ya que la suma final de las compensaciones será definida después de la evaluación completa de los daños.
La radiactividad del agua vertida supera 20.000 veces la norma
Según los últimos datos de Tepco, el nivel de la radiactividad del agua vertida al Océano Pacífico desde la central averiada es 20.000 veces más alto que los límites legales permitidos en un año.
Hace unas semanas en la central nuclear se produjeron varias fugas de agua contaminada con yodo y cesio radioactivos. Desde el inicio de la avería se ha vertido al mar 520 toneladas de agua, cuya concentración de sustancias radiactivas es de alrededor de 5.000 terabecquerelios. Ahora se intenta acumular este líquido en un condensador. De momento se han logrado bombear hacia el contenedor alrededor de 450 toneladas.
La avería en la central Fukusima-1 surgió después de que un potente sismo, y el tsunami posterior, hubieran dañado el sistema del enfriamiento de los reactores de la estación. Todavía no se han conseguido eliminar las consecuencias de la avería. La compañía Tepco propuso un plan para liquidar la crisis en la planta nuclear. Según el mismo, se puede restaurar la refrigeración de los reactores nucleares dañados, pero hará falta casi un año para lograrlo.