264 niños y jóvenes asesinados en 3 meses en Honduras
Unos 264 menores de 23 años —218 varones y 46 mujeres— fueron asesinados de forma violenta en Honduras en el primer trimestre de 2011, según un informe de la organización no gubernamental Casa Alianza, que muestra un aumento significativo en la cantidad de muertes en relación con otros años o períodos de gobierno.
"Entre enero y marzo en Honduras perdieron la vida en forma violenta 264 personas menores de 23 años, de los cuales 62 (23,5%) eran menores de 18 años", declaró la ONG, que lleva ya contabilizadas un total de 6.200 muertes violentas de jóvenes desde el año 1998.
Los actos violentos contra la vida en Honduras alcanzan niveles drásticos. Casa Alianza calificó de "alarmantes" los casos de violencia y declaró que los asesinatos de niños siguen aumentando, lo que indica una tendencia al crecimiento desmedido e incontrolable de la violencia en contra de la infancia y la juventud. De acuerdo al organismo, el 66% de los homicidios queda en la impunidad.
Las ciudades en las que más asesinatos se registraron son Tegucigalpa, la capital, y San Pedro Sula, principal centro industrial del país.
Según el informe, los niños y jóvenes fallecidos en su mayoría provienen de familias de estratos pobres, que habitan en barrios y colonias con carencias de servicios básicos y limitado desarrollo social de su capital humano.
Entre las causas principales de homicidios en Honduras el informe destaca "la enemistad personal, el robo, las discusiones en estado de ebriedad, ajustes de cuentas, las drogas, problemas pasionales, problemas entre miembros de maras y enfrentamientos con la policía".
Casa Alianza alarma sobre que la avalancha de criminalidad en el país está a punto de adquirir la categoría de epidemia y estima que el fenómeno de violencia “ha aumentado su incidencia en Honduras, esta espiral de violencia es actualmente un problema de primer orden que incluso en las espacios de noticias de los diferentes medios de comunicación supera flagelos como la pobreza, la corrupción, el desempleo y la conflictividad política”.
Un estudio del Centro de Criminología y Ciencias Policíacas de la Policía Nacional Civil asegura que Honduras, con 8 millones de habitantes, se ha convertido en el país más violento de Centroamérica, con una tasa de 72,8 homicidios por cada 100.000 habitantes, seguido por el Salvador con una tasa de 64,5 asesinatos por cada 100.000 habitantes.