Rusia no entiende por qué Occidente no quiere que la ONU investigue los crímenes de Kosovo

El representante permanente de Rusia ante la Organización de las Naciones Unidas, Vitali Churkin, declaró que su país no comprende por qué sus socios occidentales no apoyan la idea de que las fuerzas de la Organización emprendan una investigación sobre los crímenes de guerra en Kosovo.

Según Churkin, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, opina que hay que llevar a cabo una investigación independiente, y por un lado los países desarrollados están de acuerdo con esta opinión.

Pero por otro, “nuestros colegas occidentales creen que es más fácil que esta investigación la realicen las fuerzas de la misión de la Unión Europea basándose en la primacía del derecho. Pero nosotros creemos, y Serbia también cree, que es insuficiente. Por ahora la discusión ha demostrado que nuestros socios occidentales están en contra de la investigación de la ONU, aunque no lo muestran directamente, sino que simplemente mantienen que es bastante con la investigación de la misión de UE”.

Churkin espera que el tema vuelva a discutirse cuando Serbia prepare el borrador para una resolución de la ONU y lo pase, con la ayuda de Rusia, al Consejo de Seguridad. “Entonces vamos a ver, qué grado de resistencia tenemos por parte de nuestros colegas occidentales ya que, a decir verdad, sus motivos y objeciones no son bastante claros ya que se trata de un crimen gravísimo, un crimen transnacional que tuvo lugar dentro de un contexto de conflicto armado, y merece la investigación más seria posible”.

La Fiscalía serbia investigó los casos de secuestros y venta de órganos durante varios años, pero necesita más recursos para las siguientes acciones  independientes. Al mismo tiempo, el mando de la misión de la UE en Kosovo, que hasta el momento había declarado que estaba listo para emprender la investigación, solo es legítimo para el territorio de Kosovo, lo que, según la opinión de Serbia, no es bastante para asegurar una instrucción de pleno valor.

Según los representantes de ese país, a los que apoya Rusia, solo los medios de la ONU pueden garantizar unos resultados fiables. Los críticos de esta posición señalan que los crímenes fueron cometidos cuando Kosovo se encotraba bajo dirección de la ONU y si la organización no los detectó entonces, no podrá realizar una investigación objetiva ahora.