Decenas de miles de personas se congregaron este viernes en el centro de Santiago de Chile para protestar contra el proyecto que prevé la construcción de cinco represas hidroeléctricas en la Patagonia chilena.
La multitudinaria marcha recorrió varias calles capitalinas importantes en dirección al palacio presidencial de La Moneda. El inicio de la misma transcurrió en un ambiente pacífico con consignas contra el gobierno y el proyecto HidroAysén, que fue aprobado el 9 de mayo.
Sin embargo, al llegar a las cercanías de la sede de gobierno, comenzaron los disturbios, protagonizados por un centenar de encapuchados, por lo que la Policía tuvo que intervenir y dispersarlos con chorros de agua y gases lacrimógenos.
Los ecologistas se oponen a la construcción de las cinco represas hidroeléctricas previstas en la Patagonia, "porque tendrían un efecto negativo en el medio ambiente y provocarían la destrucción de miles de hectáreas de bosque". Debido a esto presionan por que se apueste decididamente por energías renovables como la eólica, solar y geotérmica que actualmente no llegan al 5% de la generación total del país.
Mientras tanto el gobierno, los grupos empresariales y los economistas afirman que Chile debe duplicar su potencial energético en la próxima década, para producir la energía que se necesitará para continuar con el crecimiento económico del país.
Otras manifestaciones también tuvieron lugar en otras ciudades y se han convocado nuevas protestas en Santiago y Valparaíso.