Antes de comparecer ante el Tribunal de La Haya, Mladic será sometido a un chequeo médico
El ex líder militar serbobosnio Ratko Mladic llegó este martes a la prisión del Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY) de las Naciones Unidas, donde se le leerán los cargos y será sometido a un chequeo médico.
A primeras horas de la noche Mladic, de 68 años, fue trasladado a bordo de un helicóptero y en medio de fuertes medidas de seguridad hasta las instalaciones penitenciarias del TPIY, situada en Sheveningen, cerca de La Haya, tras ser detenido el pasado jueves en Serbia.
La extradición del ex líder militar a los Países Bajos por las autoridades de Belgrado se logró después de que un tribunal especial serbio rechazara el recurso de la defensa contra su envío al TPIY.
Se espera que la primera comparecencia de Mladic ante los jueces se produzca en el plazo máximo de una semana, en una vista en la que el acusado se podrá declarar culpable o inocente de los cargos de los que se le acusan.
En caso de que se declare culpable, sólo se organizaría una audiencia para determinar la condena, mientras que una declaración de inocencia implica el inicio de los preparativos del juicio por los cargos que se le imputan.
Conocido como el 'carnicero de Srebrenica', Mladic, ha rechazado cualquier responsabilidad del genocidio por la matanza de unos 8.000 musulmanes en esa ciudad Bosnia en 1995 y también se le acusa, entre otras cosas, de crímenes de lesa humanidad y de guerra, presuntamente ocurridos durante el asedio de Sarajevo, que se cobró 10.000 vidas durante la Guerra de Bosnia (1992-1995).
La fiscalía de La Haya ha modificado la acusación contra Mladic, disgregando en dos el cargo de genocidio para especificar el lugar y el momento de la presunta comisión del crimen. También se ha eliminado el cargo de complicidad con el genocidio y han comprimido los 15 cargos de la acusación anterior en solamente once, con el objetivo de que la imputaciones queden más condensadas y precisas.
Los cargos de lesa humanidad referidos al asedio de Sarajevo se han reducido de seis a dos, eliminándose las alegaciones de tratamiento inhumano y actos crueles, según datos de la fiscalía.
Sin embargo, muchos dudan de la imparcialidad del Tribunal Internacional, es el caso del investigador Adrian Salbuchi quien considera que el caso de Mladic es “una muestra de que los poderosos pueden evitar la justicia por sus crímenes, mientras que los más débiles no tienen otra opción que ser castigados”.
“Claramente acá (en Serbia) queda demostrado el doble discurso con el cual se manejan hoy en día no solo la Unión Europea, sino todas las instancias supranacionales de poder en torno a lo que son los crímenes de guerra”, comenta Salbuchi.
Si Ratko Mladic es un criminal de guerra, “qué tenemos entonces que decir de Ariel Sharón y Ehud Ólmert, que también tienen captura por crímenes de guerra, por las matanzas de Sabra y Chatila, en el caso de Sharón y de la operación 'Plomo fundido' que se realizó en Gaza en 2009 en el caso de Olmert”, enfatiza el experto.
“Qué tenemos también que decir de Tony Blair, o George W. Bush, cuya invasión en base a mentiras flagrantes de la nación de Irak en el 2003 ha ocasionado más de un millón de muertos, en realidad la justicia debería ser para todos, pero al parecer los poderosos pueden evitar la justicia y los más débiles, en este caso Mladic, no pueden evitarla”, finalizó.