El número de muertos por las protestas en Siria asciende a 1.200

El número de muertes por la represión de las fuerzas de seguridad contra las protestas antigubernamentales en Siria ascendió a unas 1.200, mientras que más de 10.000 sirios huyeron a los países fronterizos, según los últimos datos de la ONU.

Unas 5.000 personas partieron al Líbano y al menos 5.000 más huyeron a Turquía. La coordinadora de servicios de emergencia de Naciones Unidas, Valerie Amos, elogió los esfuerzos de los países vecinos de Siria por la ayuda prestada ante la situación e instó al Gobierno a permitir que una misión humanitaria de la ONU entre en el país para hacer una evaluación correcta.

Mientras tanto, Estados Unidos condenó con firmeza la violencia en Siria y pidió al presidente Bashar al Asad que inicie un diálogo para iniciar una transición pacífica. “Pedimos al presidente Asad el cese de la violencia. Condenamos en los términos más firmes la violencia perpetrada contra los sirios”, anunció el portavoz de la Casa Blanca, James Carney.

Según comentó a RT el consultor, investigador y escritor Adrian Salbuchi, lo que está pasando en Siria y en otros países de Oriente Próximo y del Norte de África sucede por una parte como reacción a sus problemas internos. “Pero lo que además vemos allí es una intervención notable por parte de EE. UU., Gran Bretaña y Francia. Una intervención con el objetivo de aprovecharse de estos problemas internos”, señala Salbuchi.