El portal de filtraciones Wikileaks ha publicado un vídeo en el que puede verse cómo su fundador, el australiano Julian Assange, es vigilado constantemente mientras permanece en arresto domiciliario. El pasado mes de diciembre fueron instaladas en la casa donde vive Assange tres cámaras que, como presupone el portal, graban a todos los que entran y salen de ella. Además, el activista lleva en su cuerpo un ingenio electrónico que sigue sus movimientos por la casa.
Assange está cumpliendo medio año de libertad condicional a la espera de que la Justicia se pronuncie sobre su extradición a Suecia, donde afronta cargos por supuestos delitos de agresión sexual. Él niega las acusaciones y cree que su persecución está vinculada a su actividad como fundador de Wikileaks.
El jefe del grupo derechista Big Brother Watch, Daniel Hamilton, opina que las cámaras constituyen un método ilegal de control. "A pesar de las acusaciones contra Assange, a él no se lo ha acusado de ningún delito”, explica a EFE. “Que sus movimientos, y el de quienes lo visitan, sean vigilados de esta manera supone una indignante invasión en su intimidad. Estas cámaras deberían ser retiradas inmediatamente", recalca.