Uno de los líderes del cartel Los Zetas, Edgar Huerta, detenido el sábado, admitió su responsabilidad en el asesinato de más de 600 inmigrantes de Centroamérica desde el año 2010.
Antes de matar a los inmigrantes, éstos fueron torturados para verificar si pertenecían al cartel del Golfo, el principal rival de Los Zetas.
El arrestado también admitió haber asesinado a 10 centroamericanos más y haber ordenado el secuestro de al menos seis autobuses de pasajeros que llegaron a San Fernando (Tamaulipas).
El cartel de Los Zetas, uno de los mayores en México, está compuesto por exmilitares y policías expulsados por violar la ley. Los miembros de Los Zetas son conocidos por su extrema crueldad. Los Zetas controlan el tráfico de drogas desde México hasta la frontera de Estados Unidos.
Edgar Huerta, de 22 años de edad, dejó la carrera en las fuerzas armadas del país para ingresar en Los Zetas en 2008. En sólo cuatro años fue promovido hasta convertirse en uno de los más altos cargos de la organización.
Desde 2006 más de 40.000 personas han fallecido en México asesinados por asuntos relacionados con las mafias el narcotráfico.