Según los datos de la Agencia Central de Inteligencia estadounidense (CIA), el líder libio Muammar Gaddafi empieza a carecer de combustible y dinero, por lo que no podría pagar a sus tropas. La información de la CIA señala que sus fuerzas armadas pueden sentir los efectos de esta carencia este mismo mes.
Los expertos relacionan la falta de dinero de la administración de Gaddafi con la decisión de Turquía de congelar las cuentas del gobierno libio, donde se encuentran centenares de millones de dólares. Mientras que la falta de combustible no solo afectará las capacidades combativas del ejército, sino que puede crear un problema humanitario, ya que, según reconoce el ministro de Agricultura libio, las maquinas que deben recoger la cosecha no pueden salir a los campos.
Según otros datos de la inteligencia norteamericana, Gaddafi está sopesando la posibilidad de moverse de la capital, Trípoli, ya que los bombardeos por parte de la OTAN amenazan su seguridad. Al mismo tiempo, el ex ministro de Exteriores libio, Abdel Rahman Shalgham, quien abandonó el gobierno, informó que el coronel dejará Libia en dos o tres semanas.
Según Shalgham, ahora el líder libio efectúa conversaciones con los representantes de varios países amigos para encontrar una salida que le permita evitar un proceso judicial en la Corte Penal Internacional, salir del país, y mantener su dinero. El diplomático insinuó que estas conversaciones se podrían estar llevando a cabo con Bielorrusia.
“Gaddafi es un hombre peligroso”, continuó Shalgham. “No sé qué hará antes de dejar Trípoli. Cuento con los residentes de Trípoli, que aspiran a la libertad y estoy seguro de que salvarán su ciudad de la destrucción. Espero que sean más fuertes que las ideas malas de Gaddafi”.