Los rebeldes podrán acceder a miles de millones de dólares de Gaddafi

El reconocimiento del Consejo Nacional de Transición (CNT) de Libia por parte del Grupo de Contacto como la autoridad gubernamental legítima del país podría otorgar a los rebeldes el acceso a las cuentas bancarias del régimen de Gaddafi, congeladas en diferentes bancos del mundo.

El reconocimiento del Consejo Nacional de Transición (CNT) de Libia por parte del Grupo de Contacto como la autoridad gubernamental legítima del país podría otorgar a los rebeldes el acceso a las cuentas bancarias del régimen de Gaddafi, congeladas en diferentes bancos del mundo.

Se trata de una suma de alrededor de 30.000 millones de dólares congelados en los bancos estadounidenses que podrían pasar a manos de los adversarios del líder de la Yamahiriya. La secretaria de Estado de EE. UU., Hillary Clinton, que participó en la reunión del Grupo de Contacto sobre Libia, declaró que espera que el reconocimiento del CNT le permita “acceder a fuentes adicionales de financiación”. Anteriormente, en el mes de mayo, la Casa Blanca ya anunció sus planes de redactar una ley que permitiera usar parte de los fondos congelados para ayudar a los rebeldes de Bengasi.

EE. UU. no es el único país que ha congelado los fondos de Gaddafi tras el inicio del conflicto en el país norteafricano. Así, en febrero de 2011 el 'banquero del mundo', Suiza, cerró el acceso a cerca de 415 millones de dólares pertenecientes al régimen del líder libio. “Los ingresos están congelados en Suiza de conformidad con las instrucciones del Gobierno suizo acerca de los activos potencialmente ilegales en el país”, declaró entonces el vocero de la cancillería suiza, Lars Knuchel.

Los bancos de otros países europeos también poseen fondos congelados de Gaddafi y algunas naciones incluso barajaron la posibilidad de entregar el dinero de estas cuentas a la ONU con el fin de abastecer las necesidades humanitarias del pueblo libio. Así, en abril, el Gobierno de Alemania examinaba la posibilidad de entregar a este organismo internacional 6.000 millones de euros, para que destinara estos recursos a ayudar a los insurgentes libios. "La ONU podría usar este dinero para pagar los suministros de ayuda humanitaria para aliviar los sufrimientos de la población libia", señaló en aquel momento el ministro de Economía, Rainer Brüderle.

Por su parte, ese mismo mes de abril el ministro de Finanzas de Libia, Abdulhafid Zlitni, comunicó que en el extranjero se habían congelado en total activos del país por valor de 120.000 millones de dólares. Zlitni sostenía que las reservas interiores de Libia eran sufrientes para cubrir las necesidades humanitarias del país. No obstante, en los meses transcurridos desde entonces la situación ha cambiado drásticamente y ahora en el país escasean las reservas de combustible, lo que podría provocar también una crisis alimenticia, según ha declarado el ministro de Agricultura de la nación norteafricana.

Mientras tanto, la reacción de Gaddafi a la decisión del Grupo de Contacto tomada en Estambul, no se dejó de esperar. El líder de la Yamahiriya se dirigió a sus partidarios con un comunicado transmitido por la televisión estatal señalando: “¡Que las palabras sobre el ´reconocimiento´ se hagan polvo bajo sus pies! ¡No valen ni un céntimo!”. Gaddafi se ha mostrado convencido de que el pueblo de Libia nuca aceptará al Gobierno del Consejo Nacional de Transición.

Reconociendo el Consejo Nacional de Transición de Libia, EE. UU. crea un precedente muy peligroso para todo el mundo, según el investigador y escritor Adrian Salbuchi. Para él, el gobierno “títere” de los rebeldes no va a promover los intereses del pueblo libio, sino de los países occidentales. “Un gobierno títere, como ese que formarían los rebeldes, no va a poder promover el bien común del pueblo libio. Sí van a defender los intereses occidentales en materia de petróleo, en materia de recursos, en materia geopolítica".