31 de los 33 mineros chilenos sobrevivientes en el accidente ocurrido en agosto del año pasado en Atacama, presentaron una demanda contra el Estado, reclamando una suma equivalente a más de 16 millones de dólares por la presunta negligencia que llevó al derrumbe de la mina.
En la demanda los trabajadores acusan al Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) de no examinar de forma adecuada el estado del yacimiento de la mina San José en el que ocurrió el accidente. El abogado Edgardo Reinoso, que lleva la demanda, declaró a los medios locales que el Sernageomin incurrió en negligencia al permitir el funcionamiento de la mina, que ya había sido cerrada varias veces por incumplimiento de las normas de ventilación y de salidas de emergencia y por haberse registrado varios accidentes laborales.
Si esta reclamación culminara con éxito, cada uno de los demandantes recibiría 250 millones de pesos (unos 537.600 dólares). Además, los demandantes esperan que la Fiscalía adopte una decisión respecto a la responsabilidad que eventualmente compete a los propietarios de la mina, Alejandro Bohn y Marcelo Kemeny, para proceder a demandarlos y obtener otra indemnización.
El 5 de agosto de 2010 los 33 mineros quedaron atrapados a 700 metros de profundidad durante más de dos meses por un desplome en la mina San José, a unos 830 kilómetros de Santiago. Aunque el rescate de las víctimas del accidente resultó un éxito, los trabajadores ya han presentado varias querellas contra el Estado chileno, así como contra los dueños del yacimiento.