El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ha delegado parte de sus poderes en el vicepresidente, Elías Jaua, y en el ministro de Planificación y Finanzas, Jorge Giordani, para el tiempo que permanecerá en Cuba a donde partió el sábado para recibir su tratamiento contra el cáncer.
“Voy a delegar en el vicepresidente, Elías Jaua, y en el vicepresidente, Jorge Gordani, algunas decisiones que hasta ahora me tocan a mí, firmas y decisiones, aquí está el decreto”, señaló el mandatario. Esa delegación de poderes es la primera en los 12 años de su mandato.
Entre las facultades transferidas a Jaua y Giordani están las funciones vinculadas con el presupuesto nacional, la exoneración de algunos tributos y las decisiones sobre cambios en las entidades públicas, entre otras.
El sábado el mandatario solicitó un permiso a la Asamblea Nacional del país para ausentarse de Venezuela durante el periodo necesario para recibir un tratamiento de quimioterapia en Cuba, donde en junio Chávez fue operado dos veces: primero por un absceso pélvico y luego por un tumor cancerígeno. El sábado el Parlamento le concedió la autorización para seguir con el tratamiento en La Habana.
Anteriormente el líder venezolano anunció que podría necesitar tratamiento de quimioterapia y radioterapia como una segunda etapa de su lucha contra el cáncer. Primero se informó sobre la posibilidad de que Chávez continuara con el tratamiento en una clínica privada sirio-libanesa de São Paulo. La elección de dicho centro médico se debía a la exitosa curación llevada a cabo allí en 2009 de la actual presidenta brasileña, Dilma Rousseff, entonces ministra de Gobernación, y del mandatario paraguayo, Fernando Lugo, ambos igualmente enfermos de cáncer. No obstante, el viernes se hizo pública la noticia de que el líder venezolano proseguirá su tratamiento en la isla caribeña.