El primer ministro británico, David Cameron, ha tomado la decisión de interrumpir su gira africana para centrarse más en el escándalo de las escuchas ilegales.
Cameron defendió el papel de Andy Coulson, su anterior asesor de relaciones públicas durante su gestión gubernamental y el ex subdirector del tabloide News of the World en la época de los pinchazos, e informó de que el Parlamento podría celebrar una sesión de emergencia este miércoles para tratar el creciente escándalo.
En sus declaraciones, el primer ministro británico intentó también distanciar a su Gobierno de la actuación de Scotland Yard, cuyo director, Paul Stephenson, dimitió este domingo.
Mientras tanto, Rebekah Brooks, ex consejera delegada en el Reino Unido de News International y otra mano derecha del magnate Rupert Murdoch, quedó en libertad bajo fianza tras ser interrogada durante más de 12 horas por la Policía británica.
Brooks, que dirigió el tabloide entre 2000 y 2003, cuando se efectuaron escuchas ilegales, deberá comparecer ante la Policía londinenses a finales de octubre.