La delegación georgiana acusó a Rusia por el incumplimiento de una resolución aprobada en octubre de 2008 que instaba a Rusia a renunciar al reconocimiento de la independencia de Abjasia y de Osetia del Sur. Sin embargo, fracasó el intento de los representantes de Georgia de convencer a sus homólogos europeos acerca de la necesidad de apoyar la revocación del derecho a voto de los parlamentarios rusos en la Asamblea. Según el jefe de la delegación rusa, Konstantin Kosachev, la idea georgiana fue apoyada por 35 votos a favor y 88 votos en contra. La mayoría de los parlamentarios que votaron en contra de los poderes de Rusia en la PACE eran representantes de la misma Georgia, de Polonia y de los países Bálticos.
Según Kosachev, "los resultados de la votación demuestran el fracaso de los esfuerzos de la delegación georgiana en transformar a la PACE en un nuevo campo de acciones militares. La decisión tomada por los legisladores significa la victoria de la Asamblea, la victoria del sentido común y la victoria del enfoque responsable al problema".
El mismo día la PACE adoptó otra resolución en la que se expresó la preocupación por la “tensión y provocaciones en las fronteras de Osetia del Sur y Abjasia, que pueden desestabilizar toda la región”. El documento también critica a las autoridades de Rusia, de Osetia del Sur y de Abjasia, que “siguen negándose a dar acceso a los observadores de la EU a estas regiones”. La PACE criticaba a Moscú y Tsjinval por no poder eliminar “las limpiezas étnicas de los georgianos en el territorio de Osetia del Sur durante y después de la guerra”.
El 30 de septiembre una comisión internacional independiente publicó su informe sobre las razones de las acciones militares entre Rusia y Georgia ocurridas en agosto de 2008. La comisión, encabezada por la diplomática suiza Heidi Tagliavini, llegó a la conclusión de que fue Tiflis quien primero emprendió acciones militares en Osetia del Sur. Según el embajador de Rusia en la EU, Vladímir Chizhov, “en el informe la comisión señala directamente quién fue el primero en empezar las hostilidades”. Empero, según el mismo documento, la comisión europea considera que la reacción de las autoridades rusas al conflicto “fue desproporcionada”.
El informe fue entregado a los representantes de ambas partes del conflicto —Rusia y Georgia— a los funcionarios de la UE, a la OSCE y a la ONU. Heidi Tagliavini prometió que en los próximos días el informe lo recibirían las autoridades de Osetia del Sur y de Abjasia.
En la noche del 8 de agosto de 2008 las tropas georgianas atacaron Tsjinval, la capital de Osetia del Sur. Rusia, para defender a los habitantes de la república —muchos de los cuales eran ciudadanos rusos— envió a sus unidades militares a ese país. A finales de agosto Rusia reconoció la independencia de Osetia del Sur y de Abjasia a pesar de que Tiflis considera estas dos repúblicas como territorios ocupados.