El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, aceptó negociar con Palestina sobre las fronteras de 1967 y reiniciar las negociaciones de paz en base a la propuesta del presidente de EE. UU., Barack Obama, aunque con reservas. Anteriormente el jefe de Estado israelí negó categóricamente la posibilidad de discutir casi la misma variante de negociaciones.
El responsable israelí confirmó anoche que su país está dispuesto a negociar "un paquete" de fórmulas fronterizas con un futuro Estado palestino, informó la radio y la televisión local de Israel. Según declaraciones de Netanyahu y de altos cargos gubernamentales, Israel "está dispuesto a aceptar un paquete que incluya una fórmula para las fronteras" con Palestina con el fin de "reiniciar las conversaciones de paz entre israelíes y palestinos y los contactos bilaterales directos".
Israel desea intentar fórmulas nuevas para reiniciar las negociaciones de paz a partir de una propuesta del presidente estadounidense, anunciada en su discurso sobre Oriente Medio el 19 de mayo pasado, cuando Obama propuso negociaciones basadas en la línea fronteriza previa a la invasión de 1967 con un intercambio convenido de territorio entre Israel y los palestinos. En mayo Netanyahu reaccionó categóricamente, insistiendo en que Israel no se retiraría de toda Cisjordania, aunque eso no fue lo que propuso Obama.
Ahora Netanyahu estaría dispuesto a negociar la paz a condición de que Israel no vuelva a las fronteras anteriores a la Guerra de los Seis Días de junio de 1967 y de que sean tenidos en cuenta los cambios demográficos en el terreno desde entonces. Según afirmó la radio israelí, el primer ministro tomó esta decisión tras haber consultado al jefe del Consejo Nacional de Seguridad, Yaakov Amidror.