Obama se enfrenta a la dura ley de inmigración de Alabama

El Departamento de Justicia norteamericano solicitará al Tribunal Constitucional que prohíba la estricta ley antiinmigración de Alabama después de que el Gobierno de Barack Obama calificara la norma de incongruente con la política migratoria federal.

El Departamento de Justicia norteamericano solicitará al Tribunal Constitucional que prohíba la estricta ley antiinmigración de Alabama después de que el Gobierno de Barack Obama calificara la norma de incongruente con la política migratoria federal.

Se trata de la ley HB56, considerada como la más estricta del país, que criminaliza la estadía indocumentada y obliga a los maestros a verificar la situación migratoria de sus estudiantes. También el documento otorga poderes extraordinarios a la Policía local para detener a individuos si hay dudas sobre la legalidad de su estancia en el país, y tipifica de delito el trabajo de inmigrantes ilegales y el alquiler de vivienda a indocumentados.

La ley HB56, que entrará en vigor el 1 de septiembre, ha provocado muchas protestas tanto por parte de los activistas de derechos humanos y clérigos, que consideran la ley "ridícula" y "anticonstitucional", como por parte de los inmigrantes, que demandaban este lunes al Gobierno de Alabama que retirase la medida.

El nuevo episodio de la polémica tendrá lugar en el Tribunal Constitucional de EE. UU., donde el Departamento de Justicia estadounidense ha interpuesto un recurso contra la ley HB56. El Demartamento quiere que el organismo judicial prohíba a los estados aprobar sus propias políticas migratorias.

Se trata ya del segundo caso en el que el Gobierno federal decide limitar los poderes legislativos de los estados en cuanto a la línea inmigratoria común. El año pasado un tribunal federal prohibió las partes clave de la polémica ley SB1070 de Arizona.

Las autoridades de Alabama defienden su posición para afrontar la inmigración ilegal. "Tenemos un verdadero problema con la inmigración ilegal en este país", dice el gobernador republicano Robert Bentley, que aprobó la ley. "En mi campaña me comprometí a [aprobar] leyes de inmigración más severas", afirma. El político añade que está orgulloso de crear la legislación antiinmigración más dura del país.

En Alabama viven entre 50.000 y 70.000 inmigrantes indocumentados y la mayoría de ellos procede de México. Según los datos de la Oficina del Censo de EE. UU., la población de origen mexicano se duplicó en el país en la última década hasta alcanzar los 31,8 millones, cifra que equivale al 63% de los latinoamericanos en el país.