Grupos rebeldes han logrado romper la defensa del complejo residencial del gobernante libio, Muammar Gaddafi, y han izado su bandera sobre sus edificios, según informan las cadenas de televisión árabes.
Actualmente los opositores continúan ocupando posiciones en el territorio del complejo, sin tener que hacer frente a ninguna resistencia. Los medios occidentales hablan de varios centenares de combatientes participando en el asalto. En los combates también intervino la aviación de la OTAN, que bombardeó el complejo antes del comienzo del asalto.
Otras partes del país también están sacudidas por los enfrentamientos. Los grupos rebeldes tomaron el control del principal puerto petrolero del país, Ras Lanuf, ubicado a 600 kilómetros al este de Trípoli. Actualmente las tropas rebeldes se acercan a la ciudad de Ben Jawad y planean comenzar su asalto en un futuro próximo.
Mientras tanto, se ha conocido que la inteligencia británica ha ayudado activamente a los opositores a organizar el asalto de Trípoli. Según informó 'Daily Telegraph', los oficiales de MI6 que se encuentran en la base de los opositores libios en Bengasi acordaron el plan de la ofensiva hacia la capital con los miembros del Consejo Nacional de Transición hace 10 semanas.
Paralelamente, la OTAN dio a conocer que no planea cerrar su misión en Libia en un futuro próximo, ya que los rebeldes todavía no alcanzaron la victoria sobre el régimen de Gaddafi. Fuentes de la Alianza Atlántica han confirmado este martes que la OTAN mantendrá su misión en Libia no solo hasta la caída de Gaddafi, sino hasta que "cesen todos los ataques y se permita el acceso a la ayuda humanitaria".
Según comentó el representante permanente de Rusia ante la OTAN, Dmitri Rogozin, “nadie otorgó el mandato de las Naciones Unidas a la OTAN, se encargó de cumplirlo por su propia iniciativa”. “Si no existiera, los miembros de la alianza se lo habrían otorgado ellos mismos. Son gente experimentada y siempre encontrarán un pretexto para justificar su presencia en Libia”, subrayó.
Recordamos que por la noche del martes un hijo de Muammar Gaddafi, Saif al-Islam, quien, según el jefe del Consejo Nacional de Transición, había sido capturado por los rebeldes, apareció en televisión y afirmó que su padre se encuentra en la capital. Añadió que el coronel se encuentra bien y que la ciudad está bajo su control.