Rusia se mantiene firme en su postura de reducir las armas estratégicas, así como en su deseo de reducir su arsenal nuclear, según informó el mandatario ruso Dmitri Medvédev en una entrevista al periódico serbio Vecernje Novosti. Medvédev hizo esta declaración tras la séptima ronda de negociaciones entre Estados Unidos y Rusia que tuvo lugar en Ginebra. “Volvemos a declarar sobre nuestra disposición de reducir las armas ofensivas en más de las dos terceras partes”, afirmó el presidente ruso.
Los dos países desean llegar a un acuerdo antes de diciembre próximo, fecha en que vence el tratado de desarme estratégico vigente “START”, que data de 1991. En julio pasado el presidente estadounidense, Barack Obama, y el mandatario ruso, Dmitri Medvédev, acordaron que el nuevo tratado fijaría entre 1.500 y 1.675 el nivel máximo de ojivas y de 500 a 1.000 el de portadores que podrá tener cada país.
El pasado 17 de septiembre Obama confirmó que su país renunciaba al polémico escudo antimisiles en Europa del Este en la llamada tercera zona de despliegue.
Asimismo, actualmente EE.UU. desarrolla un sistema alternativo a la cancelada Defensa Antimisiles (DAM), cuya creación está prevista para el año 2018. Según afirmó el Ministro de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, en una entrevista a las cadenas rusas el 16 de Octubre, si bien la fase inicial aparentemente no creará incomodidades —en cuanto a la tercera zona de despliegue del sistema—, es importante para Rusia que se aclare el rumbo de las siguientes etapas. Asimismo, calificó como una “señal muy positiva” el hecho de que Estados Unidos sí toma en consideración la conexión entre los armamentos estratégicos, tanto defensivos como ofensivos.