El Congreso colombiano ha aprobado un proyecto que busca tipificar como delito penal la discriminación racial en el país. Dicha iniciativa establece que los actos de segregación serán penalizados con entre 1 y 3 años de prisión y una multa de 10 a 15 salarios mínimos oficiales mensuales.
La nueva ley pretende poner fin no solo a la discriminación racial sino también al acoso por motivo de raza, religión, orientación sexual, ideología política, origen nacional, étnico o cultural.
Ahora la medida legislativa, obra del partido Movimiento Independiente de Renovación Absoluta (MIRA), pasará a la mesa de conciliación ya que los textos aprobados en el Congreso y el Senado difieren. Luego, la ley pasará a ser sancionada por el presidente de la República, Juan Manuel Santos.
De esta manera, las organizaciones neonazis que realizan prácticas como la persecución antisemita y racial quedarán en la ilegalidad. Desde hace algunos años estos grupos organizan reuniones donde comparten ideas del nacionalsocialismo alemán y el falangismo español.
Según el censo de 2005, el 10,5 % de la población colombiana se reconoce negra, mulata o afrodescendiente. Además, el 80 % de la población de color vive bajo el umbral de la pobreza y el 75 % gana menos del salario mínimo, como lo reveló la Comisión Intersectorial Afrocolombiana.