Un periodista de RT recuerda a sus colegas desaparecidos tras la catástrofe aérea en Chile

¡¡Por Dios, que me impactó la noticia!! Un avión de la Fuerza Aérea de Chile cayó al mar, cuando volaba hacia la isla de Juan Fernández. Una tragedia, sin lugar a dudas. Pero caló muy hondo en mí cuando me entero que entre los pasajeros viajaba parte del equipo del programa 'Buenos días a Todos', sin lugar a dudas el más famoso y exitoso de la televisión chilena.

Poco a poco voy conociendo detalles y, lo más importante e impactante, son los nombres de quienes -en el momento de redactar este artículo- se sabe que han desaparecido en el mar. Mauricio Corea, el director, apenas puede contener las lágrimas y es comprensible, porque en el 'Buenos Días a Todos' es mucho más que un equipo de profesionales, es como una familia y ahora esa familia pasa por un duro momento.

Se me oprime el corazón porque, hace mucho, también formé parte de ese equipo estupendo de profesionales. Conocí y fui amigo de quienes -hasta ahora- están desaparecidos. Silvia Slier, siempre sonriente y optimista de la vida. Roberto Bruce, con un corazón tan grande como su anatomía. Felipe Camiroaga, con quien nos veíamos a diario y siempre me saludó  "Hola, Marquitos… que dice maestro…", siempre con una sonrisa. Hay dos nuevos nombres entre los integrantes del programa a quienes no conocí pero igual me duelo por ellos. También está en la lista de pasajeros José 'Pepe' Cifuentes, relacionador público de la Fuerza Aérea de Chile.

Y cuando se habla de desaparecidos se abrigan esperanzas de que “quizás” alguno haya sobrevivido. Quizás…La esperanza es lo último que se pierde, pero sólo Dios tiene la última palabra. Y pienso en los mineros, los 33 que salvaron casi por milagro.

Esta mañana, cuando abrí en casa el computador me encontré con un mensaje de uno de mis hijos. "El 'Negro' está bien", me escribe Nicolás, y es para tranquilizarme, porque Christian, otro de mis hijos y también periodista, está ahora en el 'Buenos Días a Todos' y, hace el mismo trabajo que yo realizaba.

Mauricio Correa y Juan Carlos Díaz, los dos 'cerebros' del programa están arrasados. Ojalá pudiera estar allá, darles un abrazo y entregar una palabra de aliento. ¿Qué más se puede hacer en estos casos? … Hay tristeza, dolor. Un programa que durante años ha acompañado en las mañanas a las familias chilenas, ha cambiado el optimismo por la preocupación, el dolor, y las risas por lágrimas.

Pero hay que seguir adelante. Esta pena y esta angustia son compartidas por todo Chile, porque cuando se ven los mismos rostros durante años, la gente ya comienza a sentirlos como amigos y parte de la familia.

Mauricio, Juan Carlos, colegas del 'Buenos días a Todos', un abrazo desde Moscú, al otro lado del mundo. Aquí, en la capital de Rusia vive y trabaja un ex integrante del programa que ha sido remecido por esta noticia trágica y la incertidumbre de no saber el destino de los amigos.  Pero el temple de los chilenos es a toda prueba. Se saldrá adelante. De eso no tengo dudas.  

Marcos Borcoski

Periodista de RT