El Gobierno de Níger afirmó que Saadi, uno de los hijos de Muammar Gaddafi, se encuentra "bajo vigilancia" en territorio nigerino, pero su detención de momento no está prevista.
Un portavoz del Gobierno del país africano matizó que la posición oficial se debe a que sobre él no pesa una orden de arresto internacional como sí ocurre con el líder libio. "No hay ninguna orden de búsqueda internacional para él", justificó, antes de añadir que, junto a otras personas vinculadas al antiguo régimen libio, el ex jugador de fútbol profesional se encuentra "bajo vigilancia".
La declaración se produjo poco después de que Washington, en un aparente gesto de presión para que se consumara el arresto, asegurara que el Gobierno nigerino se puso en contacto con el Consejo Nacional de Transición (CNT) libio y se disponía a detener a Saadi Gaddafi tras interceptarle y llevarle a Niamey, la capital del país.
Horas antes, el primer ministro nigerino, Brigi Rafini, había confirmado que 32 personas próximas a Muammar Gaddafi se encontraban en territorio nigerino, aunque "recibidas" en el país por "razones humanitarias".
El hijo del líder libio, de 38 años, fue interceptado la noche del lunes por el Ejército nigerino en un convoy que acababa de llegar al norte del país.