La presidenta brasileña Rousseff le marca un gol a la popularidad de Lula da Silva
La popularidad de la presidenta brasileña Dilma Rousseff alcanzó en septiembre una cifra récord de un 71%, superando el índice obtenido en el mismo período de gobierno por el anterior mandatario, Luiz Inacio Lula da Silva.
Los nuevos números fueron revelados por el Instituto Brasileño de Opinión Pública y Estadística (IBOPE), que entrevistó a 2.002 electores entre el 16 y el 20 de septiembre en 141 municipios de todo el país. El margen de error es de dos puntos porcentuales.
Los escándalos de corrupción que hicieron dimitir a cuatro ministros no sólo no afectaron a la imagen de la presidenta, sino que mejoraron su popularidad como impulsora de una 'limpieza' dentro del Gobierno. El sondeo muestra que la aceptación de la gestión de Rousseff aumentó cuatro puntos, pasando del 67% de julio al 71% de septiembre. Solo el 21% reprueba al gobierno actual. El resultado es mejor que el 69% obtenido por Lula da Silva en 2003 en el noveno mes de su mandato.
Por primera vez la jefa del Estado logró granjearse el apoyo del electorado del sur de Brasil, que en los comicios presidenciales de 2010 votó masivamente por el candidato opositor, José Serra. Allí la gestión de Rousseff es aprobada por un 75% de la población.
Las áreas con mejor aceptación fueron el empleo, la lucha contra el hambre y la pobreza y las políticas medioambientales, mientras que las menos valoradas resultaron ser la sanidad y la carga fiscal.