Israel niega el cese del fuego con los movimientos palestinos
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, niega el cese del fuego con los movimientos radicales islámicos. Esta declaración llega después de que las fuerzas aéreas israelíes atacaran varios objetivos en la Franja de Gaza.
La tregua declarada este domingo por la Yihad Islámica en Gaza se desmoronó apenas ocho horas después con un nuevo ataque aéreo israelí contra un grupo de milicianos que se disponía a lanzar un cohete. Un miliciano palestino murió y otro resultó herido muy grave en el último ataque de la aviación israelí en el este de la localidad de Rafah, en el sur de Gaza, según fuentes sanitarias de la Franja.
Los bombardeos se realizaron tras nuevos ataques contra Israel desde el territorio de la Autonomía Palestina. Anteriormente, el movimiento Hamás había confirmado la suscripción de un armisticio, que debía entrar en vigor este domingo.
La decisión sobre la tregua palestino-israelí fue adoptada por mediación de Egipto y bajo la presión de los servicios secretos de este país.
En los ataques de la aviación israelí realizados este sábado en el sur de la Franja de Gaza murieron al menos 9 activistas del movimiento 'Yihad Islámica', reconocido por Jerusalén como agrupación terrorista.
Paralelamente, los grupos palestinos lanzaron varios misiles que estallaron en distintas áreas del sur y del centro de Israel, lo que ocasionó una baja civil y varios heridos.
Estas víctimas son las primeras registradas desde que el pasado 18 de octubre se efectuó el canje del cabo Guilad Shalit por 477 palestinos presos en las cárceles de Israel. Según lo acordado, en el plazo de dos meses desde la liberación de Shalit, Israel deberá liberar a otros 550 palestinos.
Mientras tanto, autoridades de Hamás mantienen contactos con Egipto, Turquía y representantes de la ONU para intentar evitar una escalada de la violencia, informan medios palestinos.
La cadena de televisión Al Aqsa TV, cercana a Hamás, informó también de que este movimiento se mantiene en contacto con los líderes de las milicias y facciones, especialmente con la Yihad Islámica, para tratar de evitar un deterioro de la situación.
Rusia declaró estar muy preocupada por la nueva espiral de confrontación entre los palestinos y los israelíes, y subrayó que "en Moscú perciben lo que pasa en Gaza y en el sur de Israel con una profunda preocupación". "Esperamos que el acuerdo del alto el fuego, alcanzado con la mediación de El Cairo, sea observado estrictamente", señaló el Ministerio de Exteriores de Rusia.