Tras 45 años, Cuba exige derogar la residencia automática a los cubanos en EE. UU.
El 2 de noviembre del año 1966 EE. UU. aprobó la Ley de Ajuste, que estableció las reglas de acuerdo con las cuales los cubanos pueden obtener una residencia legal en EE. UU. Hasta ahora, cualquier cubano que logra tocar tierra estadounidense, puede solicitar residencia permanente tras un año de estancia en el país.
Esta política provoca una gran indignación entre las autoridades de la isla. Con ella, creen, los estadounidenses estimulan las salidas ilegales de Cuba y, además, la inmigración clandestina a EE. UU. Los cubanos califican este enfoque como “criminal” y “demagógico” y exigen que Washington derogue esta ley.
Al recibir abiertamente a los cubanos en su territorio EE. UU. “pretende hacerlos ver como refugiados políticos, aunque ellos emigran por cuestiones económicas”. Esta es la opinión de la directora del Comité Nacional por la Libertad de 'Los cinco', Gloria la Riva, respecto a la llamada Ley de Ajuste.
Al mismo tiempo, los representantes del Partido Comunista Cubano indican una contradicción en el comportamiento del sistema estadounidense: al dar permiso de residencia en el país a los inmigrantes ilegales, mientras niegan el visado a los que presentan todos los documentos necesarios, como, por ejemplo, la mujer de uno de ´Los Cinco´, Gerardo Hernández, que fue condenado a cadena perpetua.
Oídos sordos
Otro tema que Cuba califica de injusto es el embargo impuesto por EE. UU. Esta medida perjudica al pueblo cubano social y económicamente, según se ha manifestado desde diferentes foros internacionales. Esta opinión la comparten 186 países del mundo, que recientemente a través de una resolución de la ONU volvieron a llamar a EE. UU. a levantar el bloqueo. La reacción de los norteamericanos sigue siendo la misma: ignorar las peticiones de la comunidad internacional.
Además, no solo se puede hablar del bloqueo económico, sino también del informativo, creen los cubanos. Comentan que los medios estadounidenses no pasan a sus lectores y observadores toda la información. Solo se esfuerzan en mostrar la pobreza y el hambre, pero evitan mencionar los lados positivos, como la educación y la sanidad, servicios que son gratuitos para todos los que viven en la isla.