En Cuba entrarán en vigor a partir del 10 de noviembre nuevas normas que permitirán la compraventa de viviendas entre particulares tras décadas de prohibiciones, informan medios locales.
Las nuevas normas reconocen la compraventa, permuta, donación y adjudicación de viviendas entre personas naturales cubanas con domicilio en el país y extranjeros residentes permanentes en la isla.
El objetivo de la medida es “eliminar prohibiciones y flexibilizar trámites relacionados con la transmisión de la propiedad de la vivienda”, señalan los rotativos. También se pretende “contribuir a un reacomodo voluntario de los espacios habitables”.
Actualización del modelo
Según la nueva legislación, solo se podrá ser propietario de una vivienda como residencia permanente y otra en zonas de descanso o veraneo. Los diferentes actos de transmisión de la propiedad se realizarán ante el notario público donde esté ubicado el inmueble y se aplicarán impuestos, que por el momento no se han precisado.
La compraventa de viviendas entre particulares forma parte del conjunto de ajustes económicos para “actualizar” el modelo socialista emprendido por el presidente, Raúl Castro. El problema de la vivienda ha sido durante décadas una “odisea” social, económica y burocrática para los cubanos, que ahora, por primera vez en más de medio siglo de revolución, podrán comprar y vender casas de modo legal.
Cuba tenía hasta el 2010 un déficit reconocido de unas 600.000 casas, en parte por los destrozos que causaron tres huracanes en 2008. Según datos oficiales, más del 50% de las construcciones en la isla están en mal estado y 8,5 de cada 10 edificios necesitan reparaciones, a lo que se suman los incumplimientos en los planes estatales de construcción.
El mes pasado el Gobierno de Raúl Castro también autorizó la compraventa de vehículos entre particulares. Otra de las nuevas medidas que se espera próximamente en la isla es la flexibilización de su política migratoria.
Este tipo de medidas demuestran la firme decisión del Gobierno de Raúl Castro de renovar el país y “no van a tener vuelta atrás”, opina el analista político Óscar Guisoni.
“Las próximas reformas irán consolidando la apertura de la isla hacia una especie de socialismo con algunos rasgos del mercado pero sin que el control del Estado se pierda”, dijo Guisoni en declaraciones a RT.