Gobierno de coalición sí, elecciones no: tras el voto de confianza al gabinete griego
El primer ministro de Grecia, Yorgos Papandreu, avanza en sus intentos de formar un gobierno de coalición y se ha hecho con el apoyo del presidente Carolos Papulias en este proceso. Reafirmó su compromiso con el país tras una reunión con el jefe de Estado.
“Ayer el Gobierno obtuvo el voto de confianza y hoy vine a informar al presidente sobre mis intenciones de formar un gobierno de amplia cohesión para que se implementen las leyes y otras obligaciones para cumplir el acuerdo europeo del 27 de octubre”, explicó el jefe del Ejecutivo a la prensa. A continuación admitió que el cumplimiento de Grecia con los compromisos acordados con los socios europeos “es una condición para que Grecia se mantenga en el euro”.
La víspera los socialistas lograron consolidar su voto para conservar el gabinete de Yorgos Papandreu durante una cuestión de confianza. Con 153 votos en su apoyo, de un total de 298 diputados presentes en el Parlamento, el líder socialista se mantuvo en el cargo. Al mismo tiempo, solo una de las legisladoras díscolas del grupo socialista votó a favor.
Papandreu precisa, que por el momento, su objetivo es una “amplia colaboración” que permita solucionar los problemas de la deuda soberana. Por su parte, la mayor fuerza opositora —los conservadores de la 'Nueva Democracia' que ocupan en el Parlamento 85 escaños— rechaza aceptar la propuesta del jefe del Ejecutivo. Incluso para las próximas seis semanas exigen un gabinete de tecnócratas que apruebe los acuerdos con la Unión Europea y prepare unas elecciones anticipadas, a convocar ya para mediados de diciembre.
A juicio del actual primer ministro, anticipar los comicios sería "una aventura", por lo que va a buscar el apoyo de otras fuerzas políticas sin descartar nuevos contactos con los conservadores. A ellos les alerta de que “la falta de acuerdo y cooperación siembra la preocupación entre los socios europeos”.
Grecia está a la espera de la entrega de un tramo crediticio de 8.000 millones de euros, acordado por el Fondo Monetario Internacional, pero corre el riesgo de perderlo y llegar a la bancarrota a finales de año por las discrepancias internas.