Sacarán de Afganistán a unos 200 empleados de la ONU
Centenares de empleados de Naciones Unidas serán retirados temporalmente de Afganistán debido al ataque del 28 de octubre, en el que varios hombres armados atacaron una residencia en Kabul en la que se alojaban funcionarios de la ONU.
Los talibanes se atribuyeron la responsabilidad de este atentado a través de un comunicado, indicando que se trataba de la "primera etapa" de una campaña para boicotear las elecciones presidenciales, en las que la ONU estaba participando activamente en la organización de los comicios.
A pesar de lo sucedido, el portavoz de la ONU, Adrian Edwards, insistió en Kabul en que el organismo internacional "no se retira, ni abandona" Afganistán y que continuará trabajando en la nación asiática.
El secretario general de Naciones Unidas Ban Ki-moon dijo a los reporteros en la sede general de Nueva York que unos 200 empleados serán asignados a otras oficinas de la región fuera de Afganistán, mientras que el resto se reubicarán en otros puntos más seguros dentro del país. Además aclaró que los traslados de personal no son el preludio de la salida del organismo internacional de Afganistán.
Tras reunirse con el Consejo de Seguridad, Ban Ki-moon afirmó que los trabajos de este organismo en territorio afgano continúan, y que el personal clave no será trasladado, ni se suspenderán las labores en las áreas humanitaria y de desarrollo, sino que continuarán igual que antes. Simplemente se llevarán a cabo, por un tiempo, con un menor apoyo administrativo", aclaró.