El 'Apocalipsis tailandés' ha afectado a 5 millones de personas
Las autoridades de Tailandia elevan a 562 el número de víctimas mortales de la reciente temporada del monzón. Las inéditas inundaciones han afectado a casi 5 millones de personas desde julio pasado y siguen amenazando a la población y la economía de la capital del país. Tres distritos de Bangkok aún continúan evacuados.
Conforme el agua remite en las provincias de la meseta central y en el norte metropolitano, el Gobierno empieza a contabilizar las pérdidas y el presupuesto necesario para paliar la situación. Un grupo de analistas independientes ha calculado que para rehabilitar la economía nacional será necesario invertir unos 30.000 millones de dólares.
La primera ministra de Tailandia, Yingluck Shinawatra, advierte de que el oeste de la capital podría estar inundado hasta principios del 2012. No obstante, muestra cierto optimismo respecto a la solución gradual del problema. La situación “se está estabilizando, solo hay que armarse de paciencia”, ha sugerido a sus compatriotas este martes.
Mientras, varias zonas de Bangkok continúan anegadas y el agua alcanza en algunos puntos los dos metros de altura. Decenas de miles de damnificados se alojan en los centros de acogida provisionales, adonde se han desplazado las organizaciones humanitarias que mantienen su actividad en este país asiático.
Críticas
Pese a todos los esfuerzos anteriores, resultaron anegadas siete zonas industriales en la periferia. Al mismo tiempo, en la propia capital gracias a una iniciativa de la primera ministra Shinawatra, el sistema de diques ha logrado mantener a salvo los recintos más importantes del centro comercial y financiero. Pero se ha logrado mediante el estancamiento duradero de agua en las fincas río arriba, lo que ha generado importantes críticas por los problemas que pueda conllevar.
Cerca de 400 millones de metros cúbicos de agua contenida por barreras de cemento y sacos de arena se drenan cada día hacia el mar. Con ayuda de bombas de agua el Gobierno confía en evitar nuevas pérdidas económicas en unos diez días. Este fue el plazo dado por los propios expertos del Estado Mayor de operaciones contra inundaciones.
Las inundaciones comenzaron en Tailandia en julio pasado tras el desbordamiento de los ríos del norte y la región central. Se agravaron a causa de tres ciclones tropicales seguidos, acompañados con una cantidad récord de lluvias. Para los próximos diez días los meteorólogos vaticinan un tiempo con pocas precipitaciones, favorable para que se drenen los suelos.