Rusia exigirá a los futuros padres adoptivos extranjeros que superen un curso de formación

Los ciudadanos extranjeros que deseen adoptar niños rusos serán obligados a pasar un curso de preparación especial: la ley correspondiente fue aprobada por la Duma Estatal de Rusia. Esta normativa se aplicará a las nuevas solicitudes y no tendrá caracter retroactivo.

Solo después de superar este curso las familias podrán adoptar, acoger o tomar bajo tutela a un menor. Estos programas de formación serán financiados de los presupuestos regionales. Van a incluir clases de pedagogía, psicología, principios de medicina, y el reconocimiento psicológico de todos los candidatos. Según las palabras del vicepresidente de la Duma, Oleg Morózov, estas medidas “van a permitir bajar el riesgo de que los niños se encuentren con problemas en la nueva familia”.

De acuerdo con los datos oficiales, cada año más de 8.000 niños adoptados se devuelven a los orfanatos, unos 6.000 de ellos por iniciativa de la propia familia. La administración cree esto pasa por la falta de preparación de los padres.

Los motivos

Esta medida se toma en el marco del programa del Gobierno ruso dirigido a la reducción del número de adopciones de menores rusos por extranjeros. Anteriormente, Pavel Astájov, representante del presidente ruso para los Derechos del Niño, realizó una declaración categórica en contra de las adopciones de niños rusos por parte de familias extranjeras. "Creo que debemos plantearnos reducir drásticamente las adopciones (de nuestros niños) en el extranjero. Nuestros niños deben vivir en nuestro país y ser adoptados por familias rusas", señaló.

La cuestión fue planteada después de salir a la luz el dramático caso de Vania Skorobogátov, adoptado por una pareja estadounidense que luego fue hallada culpable de homicidio involuntario del niño. Michael y Nanette Craver fueron sentenciados por una corte estadounidense a una condena de entre 16 meses y 4 años de prisión.