El embargo de Estados Unidos contra Cuba afecta a las necesidades básicas de la población cubana, como medicamentos o alimentación. Sin embargo, el pueblo no se desespera y desarrolla su propio comercio para potenciar la economía y responder a las exigencias de la sociedad.
“Para tratar de aliviar, de aflojar un poco el concepto utilizan “embargo”. Pero en realidad lo que (EE. UU.) está practicando contra Cuba es un “bloqueo”. Este bloqueo es mucho más fuerte”, relata para RT, Basel Ismail Salem, un refugiado procedente de Palestina, quien vinculó su vida a la revolución y encontró en la isla su segunda patria.
“Llevo 23 años en Cuba y soy testigo de las dificultades y de las escaseces que estoy viviendo como un cubano más”, agrega Basel, quien se considera un isleño más, pero con sangre palestina. Nacido en la Franja de Gaza, él subraya que Cuba y Palestina comparten ahora el mismo destino, luchando cada una contra su propio bloqueo.
Además, el joven señala que en términos prácticos, este cerco afecta ante todo al ciudadano común y corriente. Percibir el bloqueo estadounidense únicamente como un mecanismo de ejercer presión contra el Gobierno cubano es caer en un error. Sus medidas afectan directamente a la población; incluso en las cosas más sencillas, añade Basel y su postura coincide con la de los analistas.
Hecho en Cuba con amor
“El pan que llega a la mesa de familias cubanas es elaborado con harinas importadas a veces de Europa, de países tan lejanos como Rusia, o de Asia, de países como China. Esto encarece el pan. Encarece la producción, encarece el costo de harina”, explica el analista político Javier Salado.
Pero no sólo son los valores materiales los que resultan perjudicados. El líder de la famosa orquesta ‘Bamboleo’, Lázaro Valdés, confiesa que la cultura cubana queda aislada a causa de la decisión de Washington. Participar en algunos concursos musicales internacionales es casi un milagro para los artistas de ese país caribeño.
“Nosotros no vendemos política. Vendemos música. Pero bueno, sí nos afecta muchísimo. Nosotros no aparecemos casi nunca en ningún premio. De hecho en todas las televisoras latinas, sobre todo las que vienen de EE. UU., sobre todo que dirigen directores mexicanos, la música de Cuba no está”, dice el director de la orquesta ‘Bamboleo’.
En esta situación una de las pocas salidas para Cuba, que ya lleva más de medio siglo sufriendo el bloqueo estadounidense, es desarrollar su comercio interno, aprovechando los recursos del país. Algo que ya hacen muchos trabajadores por cuenta propia, como por ejemplo, Isabel, dueña de una tienda de artesanía. Ella asegura que el cerco casi no se refleja en su trabajo.
“Todo lo que ves aquí es hecho en Cuba. Nada es traído de otro lugar. Todo es típico, cerámica, madera, todas las maderas del país, las maderas más relevantes”, relata Isabel. La actitud de esta mujer es sólo una forma en que la nación caribeña manifiesta su derecho a tener una vida digna, algo que se hace patente por doquier.
Además, a pesar de las drásticas condiciones del bloqueo, los cubanos no se rinden, y parece que este pueblo aprendió del embargo que nunca le podrán quitar lo que hacen con el corazón y con sus propias manos.