El ex presidente israelí ya está tras las rejas por violación
El ex presidente israelí Moshé Katsav ingresó a la prisión de Maasiahu, al sur de Tel Aviv, donde pasará 7 años purgando una pena por violación y delitos sexuales cometidos contra tres subalternas cuando era titular de Turismo y jefe del Estado.
El ex presidente cumplirá su condena en un ala del centro penitenciario destinada a presos religiosos. Además estará sometido a una extrema vigilancia ante el temor de que pueda intentar suicidarse.
El Tribunal Supremo israelí desestimó el pasado 10 de noviembre su apelación a la condena carcelaria dictaminada en marzo pasado por una corte del Distrito de Tel Aviv.
El que fuera jefe del Estado de Israel entre el 2000 y 2007 también fue sentenciado a dos años de libertad condicional y a pagar 100.000 shekels (unos 20.000 euros o 28.300 dólares) a una de las mujeres que violó.
Katsav, que permaneció aparentemente impasible durante todo el proceso judicial, defiende su inocencia y alega que las relaciones sexuales con una de las demandantes fueron consentidas.
En diciembre del 2010, el mismo tribunal de Tel Aviv lo había declarado culpable de violación contra una ex funcionaria del Ministerio de Turismo, del que fue el máximo responsable entre 1996 y 1999.
También lo consideró culpable de abuso y acoso sexual contra dos funcionarias de la Presidencia, así como de otros delitos menores como abuso de poder, obstrucción a la justicia y acoso a testigos.