El 'sueño americano' entra en coma: EE. UU. pierde más profesionales que nunca
Estados Unidos, país que siempre atrajo a emprendedores altamente capacitados de todas las esferas de la ciencia, los negocios o la cultura, sufre una fuga de profesionales que bate récords.
Según un estudio reciente, hoy residen en el extranjero más ciudadanos estadounidenses que nunca. Una estadística del Departamento de Estado muestra que actualmente unos 6,4 millones de personas estudian o trabajan fuera de su país, una cifra sin precedentes, según la consultora Gallup.
En el estudio, que abarca 135 países, la empresa llega a la conclusión que esta tendencia es reciente y que la cantidad de estadounidenses que abandonaron su país en los últimos años aumentó drásticamente.
En dos años el número de ciudadanos entre los 25 y 34 años de edad que viven en el extranjero pasó del 1% a más del 5%, mientras que entre los menores de 25 años que quieren irse del país, el porcentaje saltó del 15% en 2009 al 40% hoy día.
Para un país que siempre fue considerado un imán para los extranjeros que buscan oportunidades, la estadística muestra que ahora es la tendencia inversa la que crece. Los empleos y la formación fuera de EE. UU. ahora atraen tanto a los extranjeros como a estadounidenses.
Pese a que algunos sectores de EE. UU. ofrecen oportunidades que no tienen parangón en otros países, el 'sueño americano' fue eclipsado en los últimos años por los trastornos económicos y el aumento de la tasa de desempleo hasta el 9%. Paralelamente, muchas de las grandes empresas estadounidenses fueron creando nuevos empleos en otras partes del mundo. Por ejemplo, el gigante de la banca Goldman Sachs anunció este año que está ofreciendo 1.000 nuevos puestos de trabajo en Singapur. Además, la suspensión del programa de transbordadores espaciales de la NASA decretado este año impulsó a muchos especialistas del sector a abandonar el país.
"Tenemos muchos proyectos relocalizados fuera del país", dijo a RT Giovanni Pinzon, un técnico aeroespacial que se quedó sin trabajo después de trabajar durante muchos años en el programa espacial estadounidense.
En un país que durante décadas brindó deslumbrantes oportunidades de empleo, crece el sentimiento de que quizá existan mejores perspectivas laborales fuera de la depresiva atmósfera de la economía nacional.