Los republicanos irán contra Irán: prometen sabotear a la república islámica
Estados Unidos debería llevar a cabo operaciones secretas en Irán y Siria, con misiones que podrían incluir sabotaje y asesinatos de científicos que trabajan en el programa nuclear iraní. Esta es la propuesta que han formulado algunos republicanos que aspiran a representar a su partido en las próximas elecciones presidenciales.
Los investigadores extranjeros que participen en el programa nuclear de Irán, tendrían que ser considerados combatientes hostiles como Osama Bin Laden y merecen recibir un trato similar, según el ex senador de Pennsylvania, Rick Santorum. "En Rusia e Irán se encontraron muertos unos científicos. Espero que EE. UU. esté vinculado con estos asuntos", expresó el político.
Al mismo tiempo, el precandidato republicano no excluyó la posibilidad de organizar otros actos de violencia en territorio de la república islámica. "Haríamos todo lo posible para desactivar el programa nuclear de Teherán. Se sobreentiende que realizando varias operaciones secretas", dijo.
Santorum confesó que le alegraría saber que los servicios norteamericanos estuvieron detrás de la reciente explosión en en una base militar cerca de la capital iraní, acción que causó la muerte de al menos 20 personas. Algunos expertos vinculan esa acción con el intento de desactivar el programa nuclear de Teherán.
'Todas las teclas son buenas'
Otras medidas propuestas por los republicanos pasarían por el sabotaje político y económico de Irán. No en vano, Newt Gingrich, expresidente de la Cámara de representantes, considera necesario llevar a cabo sabotaje industrial contra las empresas más importantes del país.
Como posibles blancos señaló a la mayor refinería de Irán. Gingrich prometió que, en caso de asumir la Presidencia se centraría en organizar operativos subversivos en esa planta a diario. "En el territorio iraní hay solo una refinería de petróleo grande. Me centraría en hacer fracasar su trabajo diariamente", declaró.
Por su parte, el ex gobernador de Massachusetts Mitt Romney sugirió la idea de apoyar en secreto a la oposición iraní. "En última instancia, el cambio de régimen en Irán será lo que haga falta", subrayó.
En cuanto a otros estados de la región que también "necesitan alternancia en el poder" los dos políticos señalaron a Siria. De acuerdo con Gingrich, habría que "hacer todo lo posible, de manera abierta o en secreto, pero sin usar a las tropas norteamericanas, para ayudar a la oposición a derrocar al gobierno actual".
"Llegó el momento de utilizar no solo las sanciones, sino también varias operaciones secretas en Siria para lograr que sea cambiado el régimen", añadió Romney.
Práctica saboteadora
Estas iniciativas de carácter violento no son nada nuevo en el curso internacional de los políticos republicanos, insiste el periodista y politólogo, Alberto Gruz.
En 2007 el gobierno de George Bush destinó 400 millones de dólares para financiar varias operaciones encubiertas en Irán. Según el experto, una parte considerable de ese dinero recayó en los participantes del grupo Jundallah, una de las organizaciones terroristas que actúan en territorio iraní.
"Es una gran hipocresía, pero estamos acostumbramos a la hipocresía occidental, en concreto estadounidense. No es la primera vez que lo hacen y no será la última, y eso tiene mucho que ver también con esta connivencia por parte de los servicios secretos estadounidense e israelíes para asesinar a los científicos nucleares en 2010", opina el analista.