Desde hace una semana El Salvador atiende las emergencias por inundaciones y deslaves provocados por el huracán Ida. Las cifras del desastre anuncian un trágico final con 192 muertos y al menos 80 desaparecidos. Ahora el país se encuentra en la fase de rehabilitación y espera de la llegada de ayuda humanitaria mundial. "A una semana de la emergencia podemos asegurar que tenemos la situación humanitaria bajo control, aunque siempre hay que hacer ajustes. No hay una comunidad afectada que no haya recibido la ayuda que corresponde a la primera fase de la emergencia", declaró el viceministro de Gobernación, Ernesto Zelayandía.
A causa de la catástrofe que provocó el huracán Ida, el Sistema de Protección Civil oranizó la "más grande operación" de rescate y auxilio de las víctimas desde los terremotos de 2001.
"Hace exactamente una semana despertamos horrorizados al conocer esta tragedia y ahora numerosas familias lloran a sus muertos y hacen cálculo de los daños sufridos en sus pertencias", exclamó el obispo auxiliar de San Salvador, Gregorio Rosa Chávez, durante una misa en la catedral capitalina dedicada a las víctimas.
El director de Protección Civil, Jorge Meléndez, daclaró que varios países empezaron a enviar la ayuda alimenticia y médica, entre ellos están Cuba, España, Estados Unidos, Panamá, Japón, Nicaragua, Francia, Argentina, Venezuela, Guatemala e Israel. Más de 14 mil personas perdieron sus hogares por el paso de Ida, ahora viven como damnificadas en 117 albergues temporales. Además fueron destruidas o dañadas muchas infraestructuras importantes del el país.